Vivir con fibromialgia: ‘El diagnóstico es tortuoso; pasé 6 meses buscando especialistas’
Ciudad de México, 12 mayo 2024.-Pacientes con fibromialgia enfrentan un diagnóstico tardío. Al ser una enfermedad con mayor incidencia en mujeres también los estereotipos de género son una barrera para un tratamiento adecuado.
“Tortuosa” es la palabra que ocupa Paola de 32 años para describir cómo es llegar a un diagnóstico de fibromialgia. Tras 6 meses de búsqueda con diversos especialistas, alguien le dio nombre a sus dolores articulares de día y noche.
El camino hacia un tratamiento no sólo incluyó meses de incertidumbre, también experiencias que remarcaban un estereotipo de género: las mujeres exageran sus dolores. Por ello, en el Día Mundial de la Fibromialgia y Fatiga Crónica nos cuenta su historia.
De acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) retomados por la Secretaría de Salud, 2% de la población y 4% de pacientes hospitalizados por diversas causas padecen fibromialgia. Entre 80 y 90% de los casos se presenta en mujeres de 30 a 50 años. Además, pacientes requieren atención en salud mental, pues entre el 60% y 70% sufre depresión y ansiedad, factores que aumentan el dolor.
¿Qué es la fibromialgia y qué lo causa? Según MedlinePlus, la fibromialgia es una afección crónica de larga duración que causa dolor en todo el cuerpo, fatiga y otros síntomas. La fibromialgia no tiene cura, pero los tratamientos pueden aliviar los síntomas. Aunque todavía se desconoce la causa exacta de la fibromialgia, algunos estudios del cerebro de personas con fibromialgia encontraron que procesan el dolor de manera a comparación de quienes no la tienen.
Paola, quien ese momento tenía 28 años, comenzó a experimentar un ardor en la piel debido al roce de la ropa, problemas de sueño presentados en insomnio y un dolor de pierna que estaba presente las 24 horas. Primero le realizaron estudios para conocer si era artritis reumatoide. Ante un diagnóstico negativo, la mandaron con un médico internista, quien decidió realizar otros estudios para conocer si pudiera tratarse de lupus.
Mayo Clinic detalla que los síntomas comienzan después de un evento, como un traumatismo físico, cirugía, infección o estrés psicológico significativo. En otros casos, los síntomas se acumulan progresivamente con el tiempo sin que exista un evento desencadenante. Muchas personas con fibromialgia también tienen dolores de cabeza tensionales, trastornos de la articulación temporomandibular, síndrome de colon irritable, ansiedad y depresión.
En centros de salud, Paola recibía comentarios respecto a su corta de edad para vivir con dolor. En reuniones familiares o reuniones con amistades, Paola prefirió recluirse porque no tenía ánimos. Sentía su cuerpo cortado, tal como si estuviera a punto de darle gripe. Recibir comentarios estigmatizantes sólo incrementaban su malestar.
¿Cómo afecta la fibromialgia psicológicamente? Área Humana informa que el dolor es una sensación localizada en alguna o varias partes de nuestro cuerpo. Cuando el dolor se mantiene en el tiempo es considerado un dolor crónico. El dolor crónico produce emociones, modificando la relación con nuestro entorno. Algunas personas al presentar alteraciones en el estado de ánimo pueden consumir fármacos antidepresivos y ansiolíticos, además de la medicación para mitigar el dolor. El desconocimiento de la fibromialgia en especialistas repercutió en la reproducción de estigmas.
El Instituto Nacional de Salud Pública retoma que, en países de ingresos bajos y medios, entre el 76% y 85% de población con desórdenes mentales carece de acceso al tratamiento necesario. En México, una de cada cinco personas con un trastorno psiquiátrico en los últimos 12 meses recibió algún tipo de atención para este problema y más del 75% de casos graves y moderados entre adultos no recibieron atención médica o psicológica por carencia de acceso.
Fibromialgia Sevilla explica que entre las posibles causas para que la incidencia de la fibromialgia sea mayor en mujeres se ha detectado los cambios bioquímicos relacionados con cambios hormonales o menopausia, contaminantes ambientales y el estrés acumulado por llevar tareas que no son valoradas dentro o fuera del hogar. Mujeres con Ciencia destaca que un número de estudios, cada vez mayor, demuestra el sesgo hacia las expresiones de dolor de las mujeres.
Esto afecta de manera negativa el diagnóstico y el tratamiento posterior. Cuando el dolor físico de las mujeres se toma en serio, la salud y su bienestar mejoran. Dichos retos son añadidos cuando también existe un sesgo racial. En su caso, Paola considera que el estereotipo de género también fue un impedimento para acceder a un diagnóstico y tratamiento oportuno.
con información de https://www.sumedico.com/