Montreal, 10 de enero del 2018.- La legalización de la venta y el consumo de marihuana en Canadá este año es un hecho, pero la forma en que se manejará este comercio a partir del 1 de julio genera todavía dudas.
El proyecto de ley cumple la promesa electoral realizada por el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, a finales de 2015, cuando se comprometió a despenalizar el consumo de marihuana para proteger a menores y eliminar una fuente de financiación de organizaciones criminales.
Se prevé que el proyecto de ley sea aprobado sin problemas por la Cámara Baja del Parlamento canadiense, ya que el Partido Liberal de Trudeau está en control de la mayoría absoluta.
Con esta ley, los canadienses mayores de 18 años de edad podrán cultivar hasta cuatro plantas de marihuana o comprarlo en establecimientos autorizados, pero varios senadores han advirtido al gobierno que necesitan más tiempo para poder analizar de una forma detenida y detallada el proyecto de ley C-45 sobre el tema.
En tanto, algunas provincias como Quebec, Ontario y Nueva Brunswick se han pronunciado sobre la forma como manejarán este comercio a partir del momento de su legalización, destaca Radio Canadá Internacional.
En el caso de Quebec, decidió que la venta de la marihuana será controlada por la provincia y no por particulares, y será la Sociedad de Alcoholes de Quebec, SAQ, la compañía responsable de crear una filial que se llamará Sociedad Quebequense de Cannabis, SQC, que será la responsable de todo el proceso de venta.
Alain Brunet, presidente y director general de la SAQ, que trabaja para la compañía estatal desde hace 37 años, señaló que para comenzar hay que trabajar sobre la aceptación social de esta legalización, pero también sobre la prevención y la educación.
Agregó que será un desafío vender un producto sin hacer ni promoción, ni mercadeo y ser al mismo tiempo sensible a su consecuencia sobre la salud pública.
Al principio lo que nos piden que hagamos es apropiarnos del mercado que ahora es ilegal, mientras la producción era ilegal y comienza apenas a organizarse, señala Brunet.
La SAQ está planificando el número de tiendas que se van a abrir, que por el momento son unas 15, pero según los planes y con el correr del tiempo se espera que haya posiblemente alrededor de 100 ó 150 tiendas en la provincia.
Brunet indicó que no tiene duda de que con el tiempo se logrará eliminar el mercado y la venta ilegal de marihuana. Se hizo con el alcohol. En Quebec se legalizó el alcohol en 1921. En ese momento no se hablaba de eliminar el mercado ilegal y el contrabando de alcohol en los primeros años de la SAQ.
Se estima que en un principio el gramo de marihuana puede venderse entre 8 ó 9 dólares en estas tiendas.
En cuanto a su producción, la ley federal es muy clara sobre este punto, serán productores locales, quebequenses y canadienses certificados por el gobierno que producen marihuana para uso médico.
Las tiendas de venta de la SQC, serán independientes, relativamente pequeñas, de unos 600 metros cuadrados y atendidas por un personal competente y con una formación particular que pone el acento sobre la salud pública. Sin ninguna estrategia de mercadeo.
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