- La Universidad ha dado pasos significativos hacia la creación de un entorno más inclusivo y seguro
- Desde 2006, la Defensoría ha trabajado para atender quejas y sancionar violencias
Pachuca de Soto, Hidalgo, 19 de septiembre del 2024. – La Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) ha dado un paso significativo hacia la consolidación de una cultura institucional más ética, equitativa y comprometida con la protección de los derechos humanos, esto al implementar en sus unidades académicas, administrativas, además de sus organizaciones sindicales y el Consejo Estudiantil Universitario del Estado de Hidalgo (CEUEH), un total de 41 subcomités institucionales de ética, igualdad e integridad.
La Defensoría Universitaria dio a conocer que en un contexto marcado por la necesidad de romper deudas históricas en materia de igualdad de género y derechos humanos, la máxima casa de estudios en Hidalgo fortaleció su estructura con la creación del Comité Institucional de Ética, Igualdad e Integridad, encabezado por el rector Octavio Castillo Acosta.
Dicho Comité está encargado de establecer, de manera transversal y con perspectiva de género; las políticas, las decisiones, los marcos de actuación y las acciones en materia de conducta ética apegada a los valores universales e institucionales, el goce y ejercicio de las igualdades para potenciar el empoderamiento de las personas en el contexto del impulso de la integridad, así como decidir y articular las resoluciones y acuerdos para la prevención, atención y erradicación de las violencias, las desigualdades, la discriminación, la intolerancia hacia la diversidad y la deshonestidad académica o laboral.
Del Comité proceden los subcomités, que tienen el objetivo principal de difundir y ejecutar las políticas así como las decisiones del antes mencionado órgano, además de coordinar acciones para garantizar un entorno equitativo y respetuoso, al asegurar que las decisiones se apliquen de manera inmediata y efectiva.
“Los subcomités podrían ayudarnos a detectar cuál es la realidad de sus planteles o dependencias, qué es lo más urgente y prioritario. Asimismo, son la principal herramienta para poder acercar las cuatro funciones que tiene la Defensoría: atender, sancionar, prevenir y erradicar”, explicó en entrevista Elsa Ángeles, titular de la Defensoría Universitaria.
Mencionó que el siguiente paso será la capacitación de las y los miembros de los subcomités, la cual dará inicio el 23 de septiembre para dependencias e institutos, el 24 del mismo mes será para las organizaciones sindicales y el Consejo Estudiantil, mientras que el 27 de septiembre se llevará a cabo para las escuelas superiores y preparatorias.
Mientras, su operación formal comenzará en octubre de este año, para atender quejas y acompañar a las víctimas, además de ejecutar su principal misión, que es la prevención y la capacitación, tareas esenciales para erradicar la violencia.
Por otro lado, la defensora universitaria puntualizó que, entre los logros más recientes destaca la socialización de los nuevos marcos normativos, como el Protocolo para Prevenir, Atender, Sancionar y Erradicar la Violencia de Género en la UAEH, el Plan de Cultura de Paz y la creación de mecanismos de mediación.
En esta línea se encuentra también la Unidad de Género, que tiene la misión de promover la igualdad y desarrollar nuevas políticas de inclusión, con especial atención en grupos vulnerables. Aunque aún no está formalmente activa, la Unidad ya trabaja para generar diagnósticos y estrategias de intervención que se adapten a las necesidades reales de la comunidad.
Como parte de su labor preventiva, actualmente la Defensoría Universitaria está a punto de iniciar con campañas sobre la violencia sexual en el transporte, así como el abuso sexual en el contexto del alcohol y las drogas. “Otro tema que estamos impulsando ahorita de manera muy importante es la necesidad de contar con baños inclusivos en todas las unidades académicas y administrativas”, recalcó.
Todo lo anterior forma parte de un esfuerzo continuo por mejorar los procesos internos y reducir los tiempos de respuesta en la atención de quejas, al eliminar obstáculos burocráticos que dificultan la denuncia y el seguimiento de casos.
“Uno de los puntos clave es que hemos aprendido que no se trata de aumentar la violencia, sino de identificarla y crear mecanismos efectivos para atenderla y sancionarla”, subrayó la titular. En este sentido, la universidad se encuentra en una “curva de aprendizaje” en la que, a través de una mayor capacitación y el fortalecimiento de las estructuras internas, busca responder de manera más ágil y eficiente a las demandas de su comunidad.
La implementación de estos mecanismos, junto con el enfoque en la transparencia y la legalidad en los procesos, sienta un precedente importante para futuras acciones. Con la mirada puesta en 2025, la Universidad se prepara para continuar este camino, asegurando un ambiente más equitativo para toda la comunidad Garza.
