Tomar un vaso con agua, recomienda el IMSS para conmemorar el Día Mundial del Riñón
Pachuca, Hidalgo, 12 de marzo 2015
- Normalmente la insuficiencia renal se diagnostica en etapas avanzadas
- Consumir 2 litros de agua al día o más, reduce el riesgo de padecerla
La degradación de la función renal suele ser progresiva y silenciosa, razón por la cual el diagnóstico de las enfermedades que la causan, a menudo se produce en una fase tardía, alertó la doctora Elvira Elvia Escobar Beristain, coordinadora auxiliar de Salud Pública en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Delegación Hidalgo.
En el marco del Día Mundial del Riñón, la especialista invitó a la población en general a tomar y compartir un vaso con agua, como acto simbólico de la lucha contra este padecimiento cuya celebración para este año es justamente “Salud renal para todos”.
Mencionó que lamentablemente la salud renal en muchas ocasiones pasa desapercibida por buena parte de la población, lo que aunado a que la degradación que causan sus enfermedades es progresiva y silenciosa, tanto su diagnóstico como su atención, normalmente se da cuando el padecimiento ya se encuentra muy avanzado.
Señaló que aún en la actualidad existen muy pocos tratamientos disponibles, siendo la diálisis y el trasplante las soluciones más viables al problema, razón por la cual, la prevención toma una mayor importancia, pues el adoptar un estilo de vida sano, es la forma más eficaz de evitar que se produzca una enfermedad renal a largo plazo.
Los factores a considerar para evitar estas enfermedades, son: la hidratación saludable a través de una correcta ingesta de agua, mantenerse en forma y activo, controlar regularmente el nivel de azúcar en la sangre, vigilar la presión sanguínea, comer sano y controlar el peso, no fumar, no automedicarse y mantener estrecha vigilancia si se padecen enfermedades crónicas.
La doctora Elvira explicó que consumir mucho líquido ayuda a los riñones a eliminar sodio, urea y toxinas, lo que implica un “menor riesgo significativo” de desarrollar enfermedades renales crónicas.
No obstante, advirtió también que una carga agresiva de líquidos podría tener efectos secundarios, por lo que se recomienda que la ingesta de líquidos sea de dos litros al día, pero considerando factores como sexo, ejercicio, clima, embarazo, lactancia, entre otros, los cuales influyen para un mayor o menor consumo de agua.
Finalmente recomendó acudir regularmente a su unidad médica y clínica de salud más cercana a fin de revisar el buen funcionamiento de los riñones, en especial si se tienen antecedentes de familiares con enfermedades renales o haber padecido alguna deficiencia como cálculos renales.