Sin importar si eres ejecutivo, médico, químico o incluso atleta, es posible que en el futuro tengas que aprender lenguajes de programación para mantener o adquirir trabajo.
“El mundo en el que vivimos corre en gran parte y pronto lo hará en su totalidad en software. Es vital que la gente entienda cómo funciona para poder salir adelante y resolver gran parte de los retos laborales y sociales que enfrente” dijo el vicepresidente de innovación y movilidad Brian Blau, de la consultora Gartner a Expansión.
José Betancourt, un desarrollador colombiano de iOS que creó una calculadora científica para iPhone y iPad –que tiene más de siete millones de descargas y es utilizada por estudiantes del MIT, Harvard y Stanford–, explicó que el desarrollo de aplicaciones móviles en los próximos años se podría masificar a medida que los lenguajes de programación de Apple y Google comienzan a unificarse bajo un mismo estándar.
“Antes crear apps para iPhone o iPad era muy complicado y exigía mucho conocimiento técnico; Objective C no era un lenguaje muy amigable y requería mucho tiempo para trabajar en buenas aplicaciones, con Swift todo eso se transformó de manera radical”, explicó Betancourt.
Swift es un lenguaje de programación multipropósito de código abierto presentado por Apple en 2014 con el objetivo de facilitar el desarrollo de aplicaciones para iOS, macOS, WatchOS y tvOS con un nivel de errores menores a aquellas basadas únicamente con Objective-C.
En el marco del WWDC 2016, Tim Cook, CEO de Apple, presentó una nueva aplicación gratuita para iPad conocida como Swift Playgrounds, que permite al usuario aprender a programar en el lenguaje a través de dinámicas sencillas.
La app está enfocada a un público joven; sin embargo, las tareas pueden apoyar incluso a adultos que busquen conocer el proceso de desarrollo y programación de una aplicación.
Para Apple, Swift representa la oportunidad de mantener un dominio y control sobre el desarrollo de software para equipos móviles.
A la fecha, la manzana tiene más de 13 millones de desarrolladores en todo el mundo, que han creado más de dos millones de aplicaciones en todo el planeta. Apple ya ha pagado más de 50,000 millones de dólares a su comunidad de desarrollo.
Educar a la población a programar en Swift ayudará a la compañía a enriquecer su ecosistema al cubrir necesidades específicas de países o profesiones. Al mismo tiempo, podría mejorar la compresión que la sociedad tiene sobre la tecnología.
“Dicen que los niños de hoy son nativos digitales porque desde pequeños saben cómo usar Facebook, Twitter o productos como iPhone o iPad, pero la realidad es que también cada vez somos más analfabetas digitales porque usamos la tecnología pero somos incapaces de entender cómo funcionan”, dijo Julián Zárate, desarrollador chileno.
Tim Bajarin, analista de Creative Strategies, explicó que el impulso de Apple por el desarrollo en Swift podría tener un impacto social mucho más amplio. “Programar te enseña estructura, orden y organización, esas también son habilidades sociales no es nada más por aprender a crear apps, sino por la posibilidad de entender un mundo cada vez más tecnológico y complejo”, dijo.
El desarrollo de aplicaciones también puede significar una oportunidad para el desarrollo profesional de las personas. De acuerdo con el ranking anual de los mejores trabajos en Estados Unidos, los desarrolladores de software están ubicados como uno de los 10 mejor pagados del país, con un sueldo anual promedio que oscila entre los 73,000 y 120,000 dólares al año.
“Comencé a programar cuando tenía 12 años. Saber código me ha permitido tener un buen empleo para sustentar a todo mi familia. Creo que más gente, independientemente de su profesión, tendrá que comenzar hacerlo. Incluso creo que así como la gramática es parte de la educación básica en las escuelas, creo que es urgente que la programación también lo sea”, agregó Blau.
