Se agrava la guerra interna en Morena por la dirigencia nacional

Delgado, quien aspira a la presidencia del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de Morena, sostuvo que aplazar el proceso, como propuso la presidenta en funciones, Yeidckol Polevnsky, corresponde a los órganos del partido.

Insistió en que se realicen tres encuestas para definir al próximo presidente del CEN y así seguir la recomendación que hizo el presidente Andrés Manuel López Obrador. No escuchar al mandatario sería una traición histórica para el movimiento, advirtió.

Al emitir un mensaje en el salón de un hotel de la Ciudad de México, el legislador llegó entre gritos de respaldo. Asistieron 111 de los diputados federales que encabeza en San Lázaro, cinco senadores, 48 diputados locales y 50 alcaldes de distintas entidades.

Delgado se ubicó en el sitio principal del salón junto a la diputada Tatiana Clouthier y el líder mexiquense Higinio Martínez.

Habían reservado asientos junto a Delgado para el coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, y la diputada Dolores Padierna, pero no acudieron.

Durante su mensaje, el diputado federal pidió un proceso transparente y democrático; que tengamos un padrón sin simulación; que no se excluya a nadie; que haya debates entre quienes quieran dirigir el movimiento. Debates públicos, que presenten sus ideas, sus proyectos; que se atienda la recomendación y el rumbo marcado por el Presidente y la dirigencia se elija por medio de encuestas.

Llamó a todos los morenistas a que se conduzcan con mucha responsabilidad y madurez política, así como a cuidar al partido.

Consideró paradójico que el gobierno busque hacer público el censo del bienestar para evitar la manipulación política de los programas sociales, mientras que el padrón de Morena sigue sin ser público porque algunos dicen tener miedo a la manipulación política.

Por la mañana, Delgado abundó en la posición de la actual dirigencia nacional de Morena acerca de postergar la elección. Dijo que el aplazamiento genera desconfianza e incertidumbre entre la militancia y cuestionó la confiabilidad del padrón de militantes que se usa en el proceso.