Ciudad de México, 24 de marzo del 2021.- Viajar al pasado y recorrer el Recinto Sagrado de Tenochtitlan y sus templos será posible muy pronto.
Al menos a través de una maqueta monumental policroma que ocupará el Zócalo de la Ciudad de México y que reproducirá las edificaciones prehispánicas arrasadas hace cinco siglos durante la Conquista.
Además de esta exhibición, prevista para finales del mes de julio, y que plasma las investigaciones más recientes del Programa de Arqueología Urbana (PAU), fundado por el arqueólogo Eduardo Matos Moctezuma desde el INAH, se abrirá a la visita pública el gran muro de cráneos mexica, o Huey Tzompantli, hallado en exploraciones recientes.
Todo lo anterior como parte también de la conmemoración de los «Siete Siglos de Historia de Tenochtitlan», según anunció la titular de la Secretaría de Cultura capitalina, Vannesa Bohórquez, en la primera entrevista concedida a medios de comunicación tras su designación en la dependencia el pasado diciembre, en sustitución de José Alfonso Suárez del Real.
A esta conmemoración se sumará, a una cuadra del Zócalo, el Palacio del Marqués del Apartado, inmueble histórico de la Secretaría de Cultura Federal cuya irregular restauración para convertirlo en el «Museo de Museos» en la pasada Administración provocó la inhabilitación de la ex titular de la cartera, María Cristina García Cepeda.
Ese sitio se prevé que ahora aloje actividades alrededor de las efemérides.
Consultada sobre los cuestionamientos de especialistas como Matos Moctezuma y Alfredo López Austin por la falta de fundamentos para señalar al 1321 como el año de fundación de México-Tenochtitlan, cuando diversas fuentes históricas apuntan al año de 1325, Bohórquez, ex titular de Cultura del Sistema de Transporte Colectivo Metro, respondió que la conmemoración de este año reconoce procesos y culturas previas asentadas en este territorio.
«La prioridad sobre este tema está vinculada al fortalecimiento de la memoria histórica y las distintas visiones. Me refiero al uso de términos como ‘Conquista’. La propia Jefa de Gobierno (Claudia Sheinbaum) ha mencionado la importancia de replantearse palabras que hemos usado de manera educativa durante muchos años, porque se busca fortalecer la importancia que tenían las culturas prehispánicas», puntualizó la funcionaria, quien antes del Metro había colaborado en recintos como el Laboratorio Arte Alameda del INBA y el MUAC y el MUCA de la UNAM.
La relevancia en el foco de las conmemoraciones se refleja precisamente en la maqueta monumental de Tenochtitlan, que será resistente a la intemperie y que permanecerá un mes en el Zócalo capitalino.
Se permitirá al público transitar entre sus edificaciones, pero no escalarlas.
Por la noche, un espectáculo de videomapping iluminará la recreación, desde la cual los visitantes podrán dirigirse, con una mayor comprensión, al Huey Tzompantli u otros restos arqueológicos del Centro Histórico, destacó Bohórquez.
«Es muy importante este tema, porque todo este trabajo tan extraordinario que han venido haciendo, tanto el arqueólogo Raúl Barrera (del PAU) como el doctor Matos, nos permite conocer con mucha más puntualidad las ubicaciones», dijo.
Por otro lado, la funcionaria descartó que vayan a ser trasladados al Paseo de la Reforma, en la glorieta de Cristóbal Colón, los llamados Indios Verdes, las efigies de los tlatoanis mexicas Itzcóatl y a Ahuízotl. Estos permanecerán en el Parque del Mestizaje, al norte de la Ciudad.
El traslado había sido propuesto por el INAH.
«Cuando se trata de mover este tipo de monumentos, se hace de manera colegiada, a través de la Comité de Monumentos y Obras Artísticas en Espacios Públicos de la Ciudad de México, integrado por todas las instancias de protección al patrimonio federales y locales y una representación de la ciudadanía. Como parte de la evaluación, hubo una revisión física que determinó que era muy complejo moverlos y se determinó no hacerlo», explicó.
Con información de: https://www.reforma.com/
