Rescatan en Macuiltianguis, Oaxaca el zapoteco con libro bilingüe
SAN PABLO MACUILTIANGUIS, Oaxaca, 22 de junio de 2017.- Iyáte sina runriu ke»bittu enitti ka xtisa’riu, rixuna rueriu la’nabani ta’ chi gukua, tixa se’eriu yesi lo yu nabani, ta’ arka, nu’ belu’ani ka benne’ gulaha riu, es la cita final de la primera publicación bilingüe sobre los antecedentes históricos, la cultura y vida de los habitantes de Macuiltianguis.
«Todo trabajo que se haga para preservar las lenguas originarias sirve para darle vida a la historia, la cosmovisión, las tradiciones y el conocimiento que heredamos de nuestros ancestros», es la traducción del último mensaje que el Grupo Cultural Tagayu’ dejó en la contraportada del libro Ta’ gukua, la’nabani, ta’ yuuriu ke’ yesi Tagayu’, Lola’a (Historia, vivencias y saberes del pueblo de Macuiltianguis, Oaxaca).
Este libro fue presentado en la comunidad, como parte del proyecto que desde hace nueve años (2008) el grupo cultural ha venido realizando, con otras actividades, cursos y publicaciones para fomentar la lengua zapoteca de Macuiltianguis.
Entenderlo y hablarlo
«No sirve entenderlo y no hablarlo, nosotros buscamos la prática oral, aprender una metodología para hablar una segunda lengua o adquirirlo a través de la dinámica de los juegos: la lotería, el dominó, la ruleta, la pirinola o el memorama», comenta la docente de 59 años de edad, Raquel Eufemia Cruz Manzano, responsable del proyecto.
En el grupo han aprendido niños, jóvenes y adultos la gramática y la guía escrita de la lengua; entre estudiantes y maestros han recopilado la historia de los barrios, las zonas arqueológicas o la iglesia del municipio; retratan los «saberes» del pueblo, el tequio o la herencia de su bebida, el tepache. En el libro también está narrada la fiesta patronal a San Pablo Apóstol y festividades tradicionales como muertos o Semana Santa.
Zapoteco, tú moriras el día que muera el sol
«Muchos confunden nuestras tradiciones con cuentos y cosas superficiales, nosotros hacemos rituales con una concienca del conocimiento, son saberes lo que nos dejaron… si tuviéramos un abuelo que nos diera una cátedra o ponencia sobre el entendimiento transmitido por generaciones, imagínense qué podríamos aprender», es la visión de Eufemia acerca de la preservación de la lengua a través del lenguaje escrito.
«Los niños de Macuiltianguis ya no hablan la lengua originaria, sólo el españo. Esto nos preocupó, porque cuando mueran los mayores que lo saben, quién enseñará a los pequeños, moriría la lengua».
Raquel Cruz Manzano mencionó que en la población, la mayoría de los que habla la lengua son adultos y adultos mayores, pero padecen de un analfabetismo peculiar al no tener noción de la tradición escrita de su idioma; de aproximadamente 450 habitantes del municipio, el 70 por ciento puede hablarlo, pero desconoce las guías y reglas gramaticales del zapoteco; aproximadamente 315 habitantes conocen la lengua originaria.
«Las lenguas indígenas de México han estado en peligro de extinción por una campaña masiva por parte de la Secretaría de Educación Pública (SEP), que se llamó Campaña de Castellanización Nacional y fundamentó que mientras no se dominara el español no servirías en las labores académicas y laborales», afirmó la maestra de Macuil.
Para la docente, este desvirtúo de las lenguas indígenas sólo podrá terminar si las instituciones culturales y las autoridades municipales de las comunidades reúnen esfuerzos para enseñar el lenguaje oral con fundamentos y reglas escritas; en el caso del grupo Tagayu’ recibió asesoría lingüística de la Universidad de Georgetown (Washington D.C.), del Instituto Lingüistico de Verano (ILV) y del Programa de Desarrollo Cultural Municipal del Estado de Oaxaca, brindado por la Secretaría de Cultura y Artes de Oaxaca (Seculta).
Con información de: http://www.nvinoticias.com/