México, 19 de enero de 2017.- Ante un escenario de incertidumbre o volatilidad en los mercados financieros, cuando se piensa en una inversión segura la compra de oro está presente en las carteras de los inversionistas y no se necesita ser uno de gran magnitud para poder comprar un lingote de oro a precio de mayoreo.
Las barras de oro vienen en diferentes formas y tamaños y hay que saber que comprar a gran tamaño permite reducir costos.
Proporcionalmente, los más caros son los lingotes de un gramo que cuestan al menos el doble del valor real de su contenido en oro y los más baratos son los lingotes de 400 onzas (12.4 kilogramos) que mantienen el estatus “Good Delivery”.
Estos últimos son los que tienen los bancos centrales y son comerciados por los traders profesionales en Londres.
Pero no es lo mismo comprar monedas de oro que lingotes, las primeras son más caras y cuanto más grande sea el lingote más barato resultará en proporción.
Al realizar compras de barras “Good Delivery”, que otorga la garantía de tener una pureza mínima de 99.5 por ciento, el inversionista no debe pagar IVA sobre el oro, ya que en la mayoría de países los lingotes de 100 onzas y 400 onzas se definen como “oro de inversión”.
Al retener el estatus “Good Delivery” pueden ser revendidos a un precio más competitivo pero para lograrlo deben mantenerse dentro de un circuito seguro, reconocido por el London Bullion Market Association (LBMA). Si estos lingotes salen de ese circuito, la cadena de integridad que garantiza la calidad al siguiente comprador se rompe.
Existen plataformas digitales como BullionVault que permite a cualquier persona comprar oro en fracciones desde un gramo y almacenar cualquier cantidad en una cámara acorazada profesional, manteniendo así el valor máximo de reventa.
El costo de tener bajo custodia este oro puede llegar a ser de 0.12 por ciento al año, con seguro incluido; comparado con comisiones de 0.4 por ciento que en general se pagan para el manejo de títulos referenciados (ETFs).
Los lingotes más pequeños que se compran para guardar en casa o en cajas de seguridad, presentan tres grandes inconvenientes: su precio costará entre dos y cuatro por ciento más sobre el valor del contenido del oro; para su entrega se deberá pagar el seguro de envío y se tendrá que contratar un seguro para el resguardo.
La cotización del metal precioso en los últimos 12 meses muestra un repunte de 10 por ciento con un precio de mil 197 dólares la onza.
Economistas del Consejo Mundial del Oro (WGC), identifican al menos seis tendencias en la economía global que soportará la demanda de oro y que influirá en su desempeño en 2017: mayor riesgo político y geopolítico; devaluación de monedas; expectativas de aumento de la inflación; valuaciones infladas de acciones en el mercado de valores; crecimiento asiático a largo plazo y apertura de nuevos mercados.
Con información de: http://www.elfinanciero.com.mx/
