Pachuca, Hgo., a 11 de junio de 2019.
- “Hidalguenses cansados de la desigualdad, pobreza, falta de oportunidades, actos de corrupción e impunidad que aún le duelen a nuestro estado”: Ricardo Baptista
- Asegura que “esta oportunidad histórica de transformación” se debe hacer con la claridad de que no se trata del proyecto de un grupo ni de un partido.
- Hace llamado a diputados de la LXIV Legislatura para signar un acuerdo de respaldo pleno al Presidente de la República.
El Presidente de la Junta de Gobierno del Congreso de Hidalgo, Ricardo Baptista González, recordó que hace 48 años, el 10 de junio de 1971, se perpetró una de las “peores barbaries cometidas por el antiguo régimen represor que aún mantenía su hegemonía”, tal fue el caso del llamado halconazo o jueves de corpus.
Durante su intervención ante el Pleno, expuso que lo anterior formó parte de la guerra sucia de los años 70´s y 80´s, plagados de represión y espionaje, tortura y desaparición forzada para quienes buscaban la reivindicación de la justicia, lo que concluyó con crímenes de lesa humanidad. “A todo esto…ni perdón, ni olvido”, subrayó.
Acontecimiento como esos, que incluso ocurrieron en otras naciones ya presagiaban que la alternancia política se preparaba y no iba a parar, dijo.
Por ello, hoy en día se debe estar conscientes de que las diferencias se resuelven con diálogo, acuerdos y voluntad política y nunca encontrarán la solución con la imposición autoritaria. Y aquí en el Congreso del estado “seguimos apostando a los acuerdos, pero sin subordinación”.
Dijo que al igual que lo acontecido en la masacre de Tlatelolco en 1968, fue “otra barbarie oficial, siempre sobre quienes exigían el alto a la represión, en defensa de las libertades y en contra de la impunidad, de quienes buscaban defender las causas justas por encima de las imposiciones que solo beneficiaban a unos cuantos”.
Comunicó que a casi medio siglo de aquella tragedia, hasta nuestros días, se desconoce el paradero de muchos estudiantes, por lo qu3e quedaron familias desechas, lesionados de por vida y sólo sobrevivieron el salvajismo y la impunidad.
Enfatizó que “no queremos, nunca más, otro jueves de corpus, nunca más otro suceso de represión y abuso, pero lamentablemente, tomaron fuerza dos de los peores enemigos que pudo tener México, al corrupción y la impunidad”.
Por lo anterior, hizo un llamado a los diputados integrantes de la LXIV Legislatura a signar un acuerdo de respaldo pleno al Presidente de la República, para transitar a una transformación en igualdad de condiciones y oportunidades, así como construir un estado justo y un país digno para las familias.
Baptista González aseguró que “esta oportunidad histórica de transformación debemos hacerla con la claridad de que no se trata del proyecto de un grupo ni de un partido. La transformación de México se trata de la suma todo eso y mucho más”.
El diputado señaló que es oportuno “sumarnos” al llamado a la unidad nacional, lo que significa hacer lo que corresponde en las entidades federativas, porque se está conscientes de que las diferencias se resuelven con diálogo, acuerdos y voluntad política.
Aseveró que “los hidalguenses están cansados de la desigualdad, la pobreza, la falta de oportunidades, los actos de corrupción e impunidad que aún le duelen a nuestro estado, pero sobre todo de las mismas promesas y la falta de resultados”.
Indicó que se debe trabajar por transitar hacia la cuarta transformación, contribuir para cambiar al estado de Hidalgo, por lo que se tiene claro que “la corrupción existe, la impunidad existe, pero la alternancia también es una realidad; y como hace 30 años inició en el norte del país, ahora es inevitable y sin duda es una herramienta que fortalece la democracia”.
El también coordinador del Grupo Legislativo de Morena manifestó que la actual administración del Presidente de México, no es un gobierno cosmético, “como el que encabezan algunos”; por ello, dijo que el país requiere de una transformación de fondo y por eso la ciudanía vertió su voluntad en las urnas el año pasado, con la esperanza de un cambio verdadero.
Ricardo Baptista abundó que la construcción de la democracia mexicana, no es producto de los últimos años, ni mucho menos producto de la casualidad, tampoco es concesión del poder; por el contrario, es producto de la lucha social y de la movilización ciudadana efectuada desde hace décadas.
“La democracia no se traduce en el simple hecho del sufragio de la ciudadanía en las urnas el día de las elecciones; al contrario, la democracia, su construcción y fortalecimiento constantemente requieren de una participación activa en todos los aspectos de la vida social y política”, reiteró.
