¿Alguna vez escuchaste sobre los frutos secos activados? Resulta que estos alimentos, al igual que las semillas, requieren de un proceso especial para ser del todo sanos.
Últimamente están muy de moda, pero ¿sabes cuál es la forma correcta de ingerirlos para no dañar tu sistema digestivo? Aquí te contaré lo que nadie te dice cuando compras tu paquete de almendras, pecanas o semillas de girasol en el mercado.
Así podrás disfrutar de los beneficios de los frutos secos y las semillas al 100%.
¿Cuál es el problema con estos alimentos?
Tanto las semillas como los frutos secos son grandes fuentes de vitaminas y minerales necesarios para un día lleno de energía. Pero resulta que ambos contienen ácido fítico, un inhibidor de enzimas que evita que las semillas y frutos broten de forma prematura.
El problema es que éste actúa sobre nuestro organismo, interfiere con la digestión e impide que absorbamos todos los nutrientes correctamente.
Cuando consumimos demasiados alimentos con ácido fítico, nuestra capacidad de absorber minerales se deteriora y por ello es importante tener cuidado cuando hacemos cambios bruscos en nuestra dieta.
¿De qué sirve activar los alimentos y qué es exactamente?
El proceso de activación hará que el problema que te conté en el párrafo anterior desaparezca. Es muy fácil de hacer y se trata de una práctica antigua y tradicional.
Básicamente consiste en dejar en remojo los frutos secos y las semillas en salmuera y luego secarlos para almacenar. Lo que logras con esto es que el alimento brote y elimine el inhibidor enzimático.
De esta forma podrás alimentarte correctamente y disfrutar de todos los beneficios de las semillas y los frutos secos.
Descubre: 10 recetas vegetarianas en menos de 30 minutos
¿Cómo se hace?
Disuelve sal en agua suficiente como para cubrir todo el alimento que quieras activar. Coloca el un bol y deja en remojo por la cantidad de horas que sea necesario (entre 7 y 24 hs). Cuela y enjuaga bien con agua.
Esparce el alimento sobre una bandeja y lleva al horno a la temperatura más baja o bien utiliza un deshidratador. Deja secar entre 12 y 24 hs. y listo. Ya está pronto para comer o guardar.
Las cantidades de sal, tiempo de remojo y tiempo de secado varían según el alimento pero no demasiado. Aquí tienes algunos ejemplos:
- Almendras: 1 cda de sal por cada taza de almendras, entre 12 y 14 horas de remojo y 12 a 24 horas de secado.
- Pecanas: ½ cda de sal por cada taza. De 7 a 12 horas de remojo y entre 12 y 24 horas de secado.
- Semillas de girasol: 2 cdas de sal por taza. Romojo entre 7 y 10 horas; y 12 horas de secado.
Como verás, es muy importante conocer estos datos. Sobre todo si estás en un plan de cambio y quieres incorporar más alimentos de este tipo en tu dieta.
Es esencial que hagas este proceso de activación o bien que compres semillas previamente activadas.
Espero que te sirva la información sobre alimentos activados tanto como a mí y que la pongas en práctica cuanto antes.
Con información de:iMUJER
