Aunque parece inofensiva, el exceso de cafeína podría causar una sobredosis y los efectos en el cuerpo son peligrosos.
El café es una de las bebidas más consumidas en todo el mundo. Se estima que, en promedio, una persona consume 1.3 kilogramos de café al año.
A pesar de ser un producto tan popular, se ha comprobado que la cafeína tiene efectos estimulantes y adictivos. Incluso algunas presentaciones de cafeína en polvo están prohibidas en algunos países como Estados Unidos y Australia.
La Administración de Alimentos y Drogas (FDA) ha advertido sobre los peligros de este producto. Según las estimaciones, una cucharada de cafeína pura equivale a consumir más de 25 tazas de café al mismo tiempo.
Algunas personas han muerto a causa del consumo de cafeína en polvo y por eso está prohibida en ciertas regiones. Pero en el Reino Unido se puede vender con libertad y una mujer sobrevivió a una sobredosis.
Usualmente las sobredosis de cafeína ocurren con el consumo de 1 o 2 gramos y los pacientes presentan taquicardia, desorientación, descomposición del tejido del músculo esquelético, alucinaciones o un estado de ánimo eufórico.
Las sobredosis asociadas a la muerte se han producido con la ingesta de más de 5 gramos de cafeína. Según el reporte médico, la mujer británica consumió 20 gramos de cafeína pura, lo cual equivale a 56 tazas de café.
La paciente llegó al hospital con taquicardia, sudoración, ansiedad y dificultad para respirar. Su frecuencia cardiaca era de 109 latidos por minutos y tenía la presión arterial baja.
El informe médico mostró que sufría de taquicardia ventricular polimórfica y otras pruebas revelaron acidosis metabólica, un grave trastorno en los electrolitos que ocasiona que el ácido se acumule en el cuerpo.
Los médicos aplicaron un reemplazo de electrolitos para contrarrestar la acidosis metabólica; sin embargo, los síntomas persistieron y fue trasladada a cuidados intensivos.
La paciente fue sedada con fentanilo, paralizada con bromuro de rocuronio y conectada a un respirador. Además se le administró carbón activado para evitar que la cafeína fuera absorbida por la sangre.
Los casos fatales de ingesta de cafeína promedian 80mg/L; la mujer británica presentó 147.1mg/L y, según los médicos, la medida real pudo ser más alta porque la prueba le fue aplicada después de varias horas de la ingesta.
La mujer fue dada de alta después de una semana en el hospital y se recuperó con ayuda de un tratamiento psiquiátrico.
La cafeína en polvo todavía no está regulada en muchos países y la paciente se dijo sorprendida de poder conseguir una cantidad tan peligrosa de una manera tan sencilla y barata.
Con información de: https://www.vix.com/es/salud
