México, 31 de julio de 2017.- En temporada vacacional, los extorsionadores aprovechan la alta ocupación hotelera en diversos destinos turísticos para tratar de obtener alguna ganancia a través de llamadas telefónicas.
Por ello, la prevención es la mejor herramienta que ayudará a evitar que el patrimonio de las personas termine en manos de la delincuencia, indicó la Secretaría de Gobernación (Segob).
Conocidos como secuestros virtuales, las extorsiones telefónicas son las llamadas que hacen los delincuentes a la habitación de algún hotel -vía conmutador – y mediante engaños o violencia psicológica consiguen “enganchar” a sus víctimas.
Durante la llamada, el delincuente hace creer que forma parte de algún grupo delictivo y que tiene vigilada a la persona; otras veces, argumenta ser un supuesto mando policiaco que realiza algún operativo dentro del inmueble.
En ambos casos, el extorsionador pide a la víctima apagar el teléfono celular y salir del hotel con la finalidad de no ser ubicado por su familia ni por las autoridades, mencionó la dependencia federal en un comunicado.
Para este momento, los extorsionadores ya habrán obtenido mayores datos de sus víctimas gracias a la información proporcionada por ellas mismas, como el nombre y teléfono de algún familiar a quien llamarán haciéndole creer que su ser querido se encuentra secuestrado.
Posteriormente, le exigirán el pago de un “rescate” a través de uno o varios depósitos en tiendas de conveniencia.
Por ello, la Coordinación Nacional Antisecuestro (CONASE) recomienda notificar a los familiares el lugar en el que el vacacionista se hospedará y, de ser posible, reportarse constantemente.
Además, evitar responder llamadas provenientes del conmutador del hotel, a menos que se haya solicitado, y moderar la información que se comparte con personas desconocidas.
De igual manera sugiere denunciar al número telefónico de emergencias 911 o 088, de la Policía Federal, cualquier llamada sospechosa que los vacacionistas reciban en su hotel.
