Pedro Álvarez Cabral, era un bisoño marinero que se encontró, -sin querer- con una tierra la cual pensó que era una isla, y resultó ser lo que hoy conocemos como Brasil. Fue en el año de 1500
El rey Manuel I de Portugal, y se ignora el porqué; encomendó la mayor y más poderosa armada portuguesa a quién nunca antes había capitaneado una expedición.
Álvarez Cabral era un noble portugués, de unos 32 o 33 años, sin ninguna experiencia en alta mar.
Las crónicas señalan que «Cabral era hijo de una familia que, desde 1385, mantenía vínculos con la Corona», y pasó a la historia como el “descubridor de Brasil”.
Y al igual que Colón cuando llegó a las Bahamas, existe la idea de que Álvarez Cabral llegó a la costa brasileña ¡por accidente!
El relato señala que el 9 de marzo de 1500 soltaron amarras desde Lisboa, 13 navíos con 1.500 hombres con destino a la India.
La expedición tenía como objetivo llegar a Calicut, sur de India, para afianzar la ruta bordeando el cabo de Buena Esperanza que había establecido dos años antes Vasco da Gama, considerado el primer europeo en navegar hasta India.
Pero la expedición, de Pedro Álvarez Cabral, tuvo un gran imprevisto: “¡se tropezó!” con Brasil.
A solo ocho días del inicio del viaje, la flota enfrentó su primera gran tormenta.
Fue tan fuerte que cerca de Cabo Verde, una de las naves, con 150 hombres a bordo, desapareció.
Con dificultad, continuaron navegando tratando de seguir la ruta de Magallanes y entonces su llegada a Brasil, fue un accidente de ruta en un viaje que tenía objetivos bien definidos. Llegar a la India.
Así entonces, extraviado y 44 días después de partir, a unos 60 kilómetros de la costa, se escuchó el gritó: «¡Tierra a la vista!». Era el 22 de abril de 1500.
Frente a ellos estaba la costa de lo que hoy es Porto Seguro. El joven navegante pensando que era una isla, bautizó al territorio “Isla de Vera Cruz” y ordenó colocar una gran cruz de madera con la divisa del rey Manuel I de Portugal. Luego ordenó el regreso de una de las naves a Portugal para llevar la noticia del descubrimiento.
Álvarez Cabral reemprendió el viaje hacia la India, y superando tormentas, alcanzó las costas de Mozambique.
Llegó luego a las costas de la India, asedió Calicut y obligó al príncipe de Cochín a firmar un tratado comercial con Portugal.
Pedro Álvarez Cabral nació entre 1460 y 1470 en el pueblo de Belmonte, y murió en 1520, en la ciudad de Santarém.
Un error de navegación –señalan- le dio la inmortalidad.
