Ciudad de México, 19 de agosto del 2024.- A casi cinco años del fallecimiento del grabador y muralista Adolfo Mexiac (1927-2019), su viuda, la pintora Patricia Salas Velasco, detalla a Excélsior la donación de 126 dibujos y grabados a los museos Nacional de la Estampa (Munae) y Nacional de Arte (Munal), que serán presentados en la muestra Mexiac. Legado de libertad, el sábado 24 de agosto, a las 12:00 horas, que abrirá en ambos recintos. Además, adelanta que próximamente entregará el acervo documental del artista, conformado por cartas, fotografías y otros papeles, al Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información de Artes Plásticas (Cenidiap), y propone que se planee una magna exposición dedicada al artista en el Museo del Palacio de Bellas Artes (MPBA) para celebrar los 100 años de nacimiento del creador que, hasta el momento, no ha tenido presencia individual como artista.
El tiempo pasa y me quedé pensando en la colección de Mexiac que tengo, en que todo esto es una gran responsabilidad. Entonces, me nació hablar con el Munae, donde se han realizado excelentes exposiciones, y platiqué con Emilio Payán para proponerle la donación.
Y le comenté que también me gustaría donar algunos dibujos, lo que me recomendó verlo con el Munal. Finalmente, estamos donado 126 obras, de las cuales 84 son grabados y 42 dibujos de Mexiac”. Por otro lado, informa que ya conversó con el investigador Alberto Híjar para que en el Cenidiap se conserve el archivo del artista, en lo que concierne a cartas, fotografías e invitaciones a sus exposiciones.
Es material que tengo en carpetas, pero ya es tiempo de legar todas estas responsabilidades y trabajar en mi obra. Yo siento mucha responsabilidad por la obra de Adolfo, aunque él jamás me pidió que hiciera todo esto, pero sí quisiera que el Cenidiap tuviera este acervo y sólo falta ver si alguna persona puede ayudarme para acabar de organizar todo. ¿Conserva usted más obra de Mexiac?, se le pregunta a Patricia Salas. “Sí tengo más, pero, como te digo, necesito tranquilamente ver qué es lo que se puede hacer, porque definitivamente no nací para los negocios. A mí me gustaría que para los 100 años de Mexiac se pudiera hacer una exposición en Bellas Artes, pero bien armada y que incluya obra mural, gráfica, dibujo y la cuestión artesanal (cerámica tapetes).
Dicha exposición, asegura, “sería muy merecida, porque él nunca ha expuesto en Bellas Artes, algunos de sus compañeros (de generación) sí lo han logrado, pero me parece que él no se queda atrás, aunque por alguna razón aún no lo han invitado. Yo quisiera que para los 100 años se empezara a trabajar algo”. Dicha muestra, dice Salas, tendría que llegar en 2027 —por lo que le correspondería a la administración que encabezará Claudia Curiel de Icaza, próxima titular de Cultura federal—, así que “vienen tres años para trabajarla bien”. ¿Por qué Mexiac nunca ha expuesto, de forma individual, en el MPBA? “No sé la razón. Sólo sé que es un artista que tan sólo su grabado Libertad de expresión (donde un hombre aparece amordazado con una cadena) es conocido hasta en China.
Imagen intermedia Hace tiempo, un curador canadiense vino (a la casa-estudio) y, cuando le mostré las fotos de Adolfo en China, me dijo que ese grabado es bastante conocido en aquel país; me parece maravilloso que ese grabado siga abriendo conciencias”. ¿Cómo recuerda ahora al artista, al creador? “Para mí, Mexiac fue un gran hombre, dotado de gran sencillez, un trabajador incansable y un hombre que fue inspiración para muchos jóvenes. Pero él tuvo momentos difíciles, como cualquier persona, problemas muy duros que superó, como siempre, trabajando, porque no hay mejor medicina para una dificultad que la terapia ocupacional. Fue el caso de la muerte de su segundo hijo que (sobrellevó) mientras realizaba el mural Las montañas de Michoacán (2002), en el Palacio Clavijero”. Por último, la también artista detalla que el 30 de agosto se inaugurará la exposición Entre los árboles, en el Museo Morelense de Arte Contemporáneo, en Cuernavaca, que reunirá obra de Mexiac, de Guillermo Monroy y Jorge Cázares Campos.
De Mexiac se incluirán 15 gráficas digitales, es decir, piezas que hizo al final (de su vida), cuando ya estaba muy malito por la degeneración macular, cuando ya necesitaba mucha luz y, obviamente, ya no podía grabar. Fue cuando le regalé una laptop para que pudiera dibujar y sus nietos le enseñaron aplicaciones para que creara sus obras. ¡Y lo hizo fascinado! Recuerdo que se levantaba temprano para trabajar con gráfica digital y cada que recibía a los jóvenes de la carrera de arte de la UAEM le preguntaban cómo lo hacía, a mí me daba mucho gusto, porque eso lo hacía feliz, aunque en realidad la gráfica de otro tipo ya no podía realizarla”, concluye.
con información de https://www.excelsior.com.mx/
