- Datos de la Profepa revelan que el Refugio Pesquero del Golfo de Ulloa, creado para proteger a la tortuga amarilla o caguama fue un fracaso; continúan muriendo ahogados una gran cantidad de ejemplares
Ciudad de México, 30 de junio del 2020.- Aun día de la entrada en vigor del T-MEC y el endurecimiento de las reglas ambientales, se abre un nuevo frente para un eventual embargo pesquero contra México por parte de Estados Unidos debido a la alta mortandad de tortugas caguama en Baja California Sur.
Con base en datos de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), el Refugio Pesquero del Golfo de Ulloa, creado hace cuatro años para proteger a la tortuga amarilla o caguama (Caretta caretta), fue un fracaso debido a que continúan muriendo ahogados una gran cantidad de ejemplares por su interacción con las redes agalleras.
El Acuerdo publicado el 23 de junio de 2016 en el Diario Oficial de la Federación (DOF), establece que la pesca comercial en la zona se detendría en caso de que se registrara el deceso de 90 tortugas al año como máximo, buscando cumplir con los requisitos de comparabilidad establecidos por Estados Unidos, para certificar a las pesquerías mexicanas que llegan a sus consumidores.
La Información obtenida por el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA) y el Centro para la Diversidad Biológica, revela que el Refugio Pesquero del Golfo de Ulloa, solo quedó en el papel, ya que, en los últimos tres años, los límites de mortandad se rebasaron sin que hubiera alguna consecuencia.
En 2017 murieron 99 ejemplares, en 2018 perdieron la vida 459 tortugas y en 2019 fallecieron 331 individuos de esta especie en peligro de extinción, según la Norma Oficial Mexicana 059.
CIFRA RÉCORD
Alejandro Olivera, representante en México del Centro para la Diversidad Biológica explicó que estudios científicos calculan que, por cada tortuga varada, encontrada muerta en la playa, hay otras tres que son arrastradas por las corrientes mar adentro.
«Haciendo una estimación conservadora, se puede determinar que en los últimos tres años han muerto al menos dos mil 350 tortugas caguama en el Golfo de Ulloa, una cifra altísima sin antecedente en otra parte del mundo», manifestó.
A pesar de que la Profepa señala que debido a la descomposición de los cadáveres no es posible verificar la interacción de los ejemplares con las artes de pesca, la propia Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), fundamentan la creación del instrumento regulatorio por la pesca incidental de tortugas caguama.
Parte de la población de tortugas caguama del Pacífico Norte pasa sus primeros 25 años de vida en Baja California Sur, donde crece y se alimenta, para después viajar a las costas de Japón con el fin de reproducirse y anidar.
En Estados Unidos, se obliga a los pescadores de Hawaii a suspender sus operaciones en caso de exceder el límite de 17 tortugas caguama muertas.
FANTASMA DEL EMBARGO
Mario Sánchez, director de la oficina regional Noroeste del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA), recordó que, en 2015, México ya estuvo a un paso del embargo pesquero por la alta mortandad de tortugas caguama, luego de que el Servicio Nacional de Pesquerías Marinas (NFMS) de Estados Unidos emitió una certificación negativa, por lo que ocurre en el Golfo de Ulloa.
“El gobierno mexicano corre el riesgo de repetir la situación que se vive con la vaquita marina en Alto Golfo de California, tomando acciones contrarreloj por la presión internacional y que, a pesar de una fuerte inyección de recursos, no ha logrado asegurar la preservación de la especie”, advirtió.
Con información de: https://www.excelsior.com.mx/
