Túnez, 25 de julio del 2019.- A los 92 años, el presidente de Túnez Béji Caïd Essebsi falleció tras haber sido ingresado en cuidados intensivos solo horas antes. Essebi es el primer presidente democrático electo en 2014 tras la caída de Zine el Abidine ben Ali. Con su muerte, solo a pocas horas del fin de su mandato, Túnez entra en una etapa de incertidumbre política
Béji Caïd Essebsi era el más anciano de los jefes de Estado después de la reina Isabel de Inglaterra y en una de sus últimas apariciones difundidas por la Presidencia del país se lo podía ver muy débil.
Su estado de salud había suscitado reclamos de parte de políticos y de la población quienes reclamaban mucha más transparencia sobre su condición, sobre todo en un contexto político bastante tenso debido a la falta de una Corte constitucional que pueda hacerse cargo en caso de vacancia presidencial. La instauración de este organismo había sido rechazado en innumerables ocasiones por los oficialistas.
En ese contexto, la población teme una incertidumbre política meses antes de realizarse nuevas elecciones democráticas.
Beji Caid Essebsi era un veterano de la política y formó parte del antiguo régimen acorralado por los desafíos de la Primavera Árabe en 2011. Era un «bourguibiste» asumido – seguidor de Habib Ben Ali Bourguiba, segundo primer ministro de Túnez después del fin de la monarquía y así impulsó la gratuidad de la enseñanza en 1956 así como la liberación de la mujer. Durante su vida, estuvo a la cabeza de varios ministerios como el de Defensa, Asuntos Exteriores, Interior, también ocupó cargos de embajador, especialmente en Francia.
