23 de abril de 2017.- El centrista Emmanuel Macron y la ultra derechista Marine Le Pen se enfrentarán el 7 de mayo en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Francia, después de conseguir el primero y el segundo lugar en la primera ronda del domingo, según proyecciones iniciales.
En una elección muy estrecha, Macron, un ex ministro de Economía que está favor de la Unión Europea y que fundó su propio partido hace sólo un año, habría logrado un 24 por ciento de los votos el domingo, según una proyección de la encuestadora Harris.
De acuerdo a la firma Elabe, el ex banquero habría ganado la primera ronda con un 23.7 por ciento.
Le Pen -líder del Frente Nacional, un partido antiinmigración y antieuropeo, habría logrado el 22 por ciento de los votos, según ambas encuestadoras. Otras tres firmas proyectaron resultados muy similares.
Si bien Macron, de 39 años, es un político novato que nunca ha ocupado cargos de elección popular, los sondeos de opinión previos a la elección proyectaban que lograría un cómodo triunfo frente a Le Pen, de 48 años.
El derrotado candidato de centro derecha Francois Fillon instó a sus votantes a apoyar a Macron en la segunda ronda, al igual que el representante socialista Benoit Hamon.
La firma Harris le dio a Fillon y al abanderado de extrema izquierda Jean-Luc Melenchon un 20 por ciento en la primera vuelta, lo que nos les alcanzaría para disputar el balotaje.
El resultado, si se confirma, significará un enfrentamiento entre políticos con visiones económicas radicalmente distintas para un país cuya actividad se desacelera comparada con la de sus vecinos y donde un cuarto de los jóvenes están desempleados.
Datos de Reuters mostraron que el euro subía a un máximo de cuatro semanas frente al dólar, a alrededor de 1.09 dólares, en respuesta a las proyecciones iniciales.
Macron está a favor de medidas graduales de desregulación, las que serán bien recibidas por los mercados financieros globales, mientras que Le Pen quiere abandonar el euro y posiblemente retirar al país de la UE.
Cualquiera que sea el resultado del 7 de mayo, significará un enorme cambio en el panorama político de Francia, que ha estado dominado durante 60 años por agrupaciones de centroizquierda y centroderecha, cuyos candidatos se desvanecieron en esta elección.
El resultado del balotaje influirá en la posición de Francia en Europa y en el mundo como miembro del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y miembro fundador de la organización que se transformó en la Unión Europea.
Con información de: http://noticieros.televisa.com
