Los países donde los Padres pagan más por la universidad de los hijos
Los padres estadounidenses pagan mucho para enviar a sus hijos a la universidad, pero los padres en los Emiratos Árabes Unidos, Hong Kong y Singapur pagan todavía más.
Los padres de los Emiratos Árabes dicen gastar un promedio de 18,360 dólares al año – más que los de cualquier otro país – en la educación universitaria de sus hijos, según una nueva encuesta de HSBC. Los estadounidenses dicen que están gastando 14,678 dólares al año, el doble de la media mundial.
El alto costo que asumen los padres en los EAU refleja el hecho de que muchas familias allí envían a sus hijos a universidades en el extranjero, apuntó Michael Schweitzer, jefe global de Ventas y Distribución de HSBC.
En Hong Kong y Singapur, es una expectativa cultural que los padres brinden a sus hijos una educación superior. «Hacerlo es muy honorable», dijo Schweitzer.
En ambos países son muy pocos los estudiantes que aportan algún dinero para financiar su educación universitaria, según el informe. Ese no es el caso en Estados Unidos, pese a la mala reputación que tienen los adolescentes estadounidenses. Allí alrededor del 37% de los estudiantes universitarios contribuyen a sus gastos escolares, una proporción que sólo supera Canadá, donde el 39% ayuda a pagar sus estudios.
Pero ofrecer a sus hijos una buena educación también es importante para los padres estadounidenses. Tres de cada cinco encuestados dijeron que estarían dispuestos a incurrir en deuda para hacerlo, y muchos dijeron que dejarían de ahorrar para su propia jubilación o dejarían de pagar el alquiler o la hipoteca si tuvieran que hacerlo.
Para evitar verse en esos apuros, Schweitzer sugiere comenzar a ahorrar desde ya para la educación universitaria de los hijos. «El costo de postergarlo es enorme».
En Estados Unidos, cerca del 70% de los estudiantes egresan de la universidad con una deuda sobre sus hombros. Pero en algunas ocasiones descubren que, incluso después de pedir prestada la cantidad máxima permitida por los préstamos federales, todavía encaran un déficit de financiación. En ese caso, el progenitor puede tener que decidir si vale la pena pedir prestado aún más dinero para ayudar.
Con información de:http://expansion.mx/