CIUDAD DE MÉXICO, 07 de junio de 2016 (Expansión) – El aumento constante en el consumo privado ha estado apalancado por un crédito creciente entre los mexicanos, algo que puede encender los focos rojos en medio de un débil crecimiento económico y ante la expectativa de que en los próximos días Banco de México (Banxico) elevará su tasa de interés referencial.
En 2015 la cartera total de crédito al consumo aumentó a tasas promedio de 7.36% anual y en los primeros cuatro meses de 2016, ha crecido en 12.28% promedio. Al cierre de abril la cartera de crédito al consumo sumó 782,866 millones de pesos, lo que representa cerca del 31% del consumo privado.
“El consumo está permitiendo que el PIB crezca por arriba del 2%, lo cual es positivo. Sin embargo, es necesario cuidar qué tan sostenible es que el consumo esté basado en el crédito. Por lo pronto hay varios factores que lo explican, el más importante, la baja inflación» dijo a Expansión el economista en jefe de Bank of America-Merril Lynch en México (BofA), Carlos Capistrán.
El consumo privado en marzo subió 4.7% a tasa anual, su mayor nivel desde diciembre pasado, cuando creció 5%. Bajo esta base de comparación, los productos y servicios nacionales aumentaron 4.6%, según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
De acuerdo con el economista, la baja inflación es en parte la que ha impulsado que los consumidores pidan más créditos pese a los bajos niveles de confianza. «Nosotros sin embargo esperamos que la inflación aumente y que eso ayude a desacelerar el crédito en algunos meses, sobretodo vía un aumento de tasas de interés por parte del banco central».
En este contexto, el crédito a través de tarjetas de crédito se ha reactivado y crece a un promedio de casi 6% en 2016 frente a 2.16% de 2015. En tanto, el crédito preferido por los mexicanos, el de nómina, ha crecido este año a un ritmo de 20%, de acuerdo a cifras de Banxico.
El aumento de la cartera crediticia no responde necesariamente a una mejora de la economía sino a las estrategias de los bancos para facilitar a sus clientes el acceso a un crédito, principalmente el de nómina, que implica un bajo riesgo para los bancos al cobrarlos directamente del sueldo del trabajador. Los créditos de nómina sumaron 5.40 millones en febrero, 8% más que un año antes.
Al cierre de enero el Índice de Morosidad Ajustado (IMORA) de la cartera de crédito de consumo toda la banca fue de 11.95%, el IMORA de tarjetas de crédito y créditos de nómina fue de 15.27 y 9.81%, respectivamente, según datos del regulador.
Al interior, sobresalen algunos bancos como Bancoppel con un IMORA de 20.46% en tarjetas de crédtio y Banorte-Ixe con 59.08%.
“Un menor crecimiento económico podría reflejarse en un deterioro de las carteras de crédito de la banca. Los riesgos de crédito tardan meses en materializarse. Su impacto sobre los índices de morosidad depende de la severidad del choque y de si viene acompañado de movimientos en las tasas de interés”, advierte Banxico en su último informe sobre el sistema financiero.
En tanto, los salarios de los empleos que se han creado en el país siguen sin recuperarse de los niveles precrisis. Al cierre del primer trimestre, las personas que ganaban de uno a tres salarios mínimos, de 2,229 a 6,683 pesos mensuales, sumaron 26.26 millones frente a los 2.97 millones que ganaban más de cinco salarios, esto es, arriba de 11,139 pesos mensuales, las cifras se comparan con las de 2008, cuando eran 19.67 millones y 5.16 millones, respectivamente.
Por lo pronto, algunos analistas esperan que tan pronto como a finales de este mes, Banxico eleve su tasa de interés referencial en, al menos en 25 puntos base a 4%, para frenar aunque la Fed se abstenga de hacer este mismo movimiento.
“El nivel de la tasa de interés de referencia en México ha quedado rezagado en relación con las presiones de depreciación de la moneda nacional. Ha sido evidente que en lo que va del año, la peor inversión para un extranjero respecto a las demás monedas emergentes ha sido en pesos mexicanos”, dice en un reporte el director de estrategia Guillermo Aboumrad.
