La Ley Electoral no ve a los discapacitados; mujer invidente quiere ser funcionaria de casilla
Ciudad de México, 16 de febrero de 2016.- La ley electoral no prevé que los discapacitados puedan desempeñarse como funcionarios de casilla. Tampoco lo prohíbe, pero en la práctica la discriminación resulta doble para los invidentes, ya que el Instituto Nacional Electoral (INE) ha aceptado a personas sordas y en silla de ruedas para contar los votos, pero no tiene procedimientos ni herramientas para que quienes padecen ceguera puedan participar como parte de las funciones en una casilla.
Aleida Flores es invidente. Perdió completamente la vista hace dos años y medio debido a un desprendimiento de retina por glaucoma.
En días pasados llegó una capacitadora del INE a su domicilio en Durango y le notificó que había sido elegida para capacitarse como funcionaria de casilla.
Aleida quiere ser funcionaria, pero la ley no ve a personas como ella contando votos, recibiendo credenciales o poniendo tinta indeleble. Así, le dijeron que sería difícil que pudiera participar.
Luego de conocer el caso, el director de Organización Electoral del INE, Miguel Ángel Solís, explicó a Excélsior que ya dio la orden de que Aleida se capacite en Durango como funcionaria de casilla. Una vez que se lleve a cabo la segunda insaculación, agregó, si ella sale sorteada se le pedirá que ocupe el cargo de escrutador, para que coloque la tinta indeleble en el pulgar derecho de los ciudadanos.
“Cuando a mí me dijeron que no, dije ‘¡Ah caray! ¿Por qué no?’ Pues si puedo realizar actividades normalmente se puede realizar de todo. No creo que no pueda realizar una actividad como funcionaria de casilla”, comentó Aleida a este diario.
Madre de un adolescente, esta mujer de 38 años realiza todas las labores de una ama de casa, como cocinar, lavar trastes o limpiar, además de que practica deporte y estudia.
Fue maestra en Zacatecas, se mudó a Durango y ahora, pensionada, se capacita para utilizar toda la tecnología que le facilite la vida, proveniente del mundo que sí ve pero que se hizo sordo, mudo y ciego para no dejar en claro en la ley cómo pueden participar las personas con discapacidad en una casilla electoral.
Indignada, Aleida pregunta a esta reportera quién hizo las leyes electorales, y al explicarle comenta: “Sinceramente aquí cabría la posibilidad de saber quién realizó las leyes, porque ni siquiera nos tomaron en cuenta. La gente con discapacidad podemos hacer de todo, quizá no de la misma manera, quizá no tan rápido, pero sí lo podemos hacer”.
“INE NO DISCRIMINA”
Aleida se asesoró con el Centro de Estudios para Invidentes de Durango (CEID), asociación que la está apoyando con las pláticas en el INE para lograr que le permitan participar.
Directamente la pregunta para Abril Meraz, directora del CEID, fue si el Instituto Nacional Electoral discriminó a Aleida Flores.
“O sea por la ley sí, en la ley no viene absolutamente nada, ni qué sí podemos, ni qué no podemos, pero al momento en que llega este caso al INE, o al menos ante el Consejo de Durango, quedan en shock. En la práctica no puede estar una persona con discapacidad visual como funcionario”, contestó.
Miguel Ángel Solís, a su vez, aseguró que “no está en el ámbito de las disposiciones de ley, está en el ámbito de lo que se requiere como capacidades para poder atender una casilla, está en el ámbito del tipo de elección que tenemos en México. El INE no discrimina. Pero teniendo una elección que en lo fundamental es de documentos, es decir, de papel, se requiere sin duda alguien que pueda leer esos documentos y esos papeles y llenarlos.”
Aleida y Abril dicen que la maestra si puede participar con listas en braille, computadora parlante o una persona de confianza que la asista.
Quieren darle la oportunidad
Mientras tanto, en el INE, ya dieron la orden de que se le permita capacitarse y encontrarle una actividad que le permita ejercer sus derechos cívicos si vuelve a salir sorteada en la segunda insaculación.
“Si a final de cuentas ella quisiera ayudar entintando el pulgar derecho, que se pueda ver la posibilidad de que se le permita hacerlo, para que se sienta incluida porque el interés del INE es la inclusión”, puntualizó el director de Organización Electoral del INE.
Así, el INE tomará acciones para subsanar lo que la ley no dice expresamente, mientras Aleida Flores manda un mensaje a los altos mandos del Instituto, a los legisladores y a los partidos que no vieron a las personas con discapacidad para dejar en la ley claramente establecido cómo pueden participar como funcionarios de casilla.
“Nos excluyeron, quizá ni siquiera se dieron cuenta. (Quiero) decirles que la gente con discapacidad no somos ciudadanos de segunda.
“También votamos, también pagamos impuestos, también somos iguales. Simple y lamentablemente nosotros tenemos una discapacidad. Es todo, pero somos iguales en todo lo demás,” afirmó Aleida, quien dicer ser una ciudadana que toma muy en serio sus deberes cívicos desde los 18 años.
Vacío legal
La ley electoral indica (artículo 83 de la Legipe) los requisitos para ser funcionario de casilla, sin especificar el caso de personas con alguna discapacidad
Ser ciudadano mexicano por nacimiento que no adquiera otra nacionalidad y ser residente en la sección electoral que comprenda a la casilla.
Estar inscrito en el Registro Federal de Electores.
Contar con credencial para votar.
Estar en ejercicio de sus derechos políticos;
Tener un modo honesto de vivir.
Haber participado en el curso de capacitación electoral impartido por la Junta Distrital Ejecutiva correspondiente.
No ser servidor público de confianza con mando superior, ni tener cargo de dirección partidista de cualquier jerarquía.
Saber leer y escribir y no tener más de 70 años al día de la elección.
Aurora Zepeda | Excélsior