La Jirafa
La jirafa es un mamífero que pertenece a la familia Giraffidae. Es propia de África y es el animal terrestre más alto del mundo. Habita en el sur del Sahara y norte de Botsuana en espacios abiertos, pastizales y sabanas.
Descripción de la jirafa
Los machos pueden alcanzar la altura de 5-6 m desde sus patas hasta los cuernos y pesar hasta 1,930 kg. Las hembras son aproximadamente un metro más pequeñas pesando 1180 kg como máximo. Poseen largos cuellos que miden alrededor de 2.4 m de largo que les permiten llegar a las hojas más altas de los árboles. Sus patas delanteras son más largas que las traseras, por lo que tienen que abrirlas para poder inclinarse a tomar agua o alcanzar objetos al nivel del suelo. A pesar de su gran tamaño, estos mamíferos pueden correr a 60 km/h. Las jirafas pueden dormir apenas dos horas en un solo día.
Las jirafas, ya sea macho o hembra, poseen cuernos llamados Ossicorns, formados por cartílago osificado (tejido óseo). Las hembras suelen tenerlos de menor tamaño. En los machos de edad avanzada, suelen aparecer depósitos de calcio que se acumulan en el cráneo pudiéndose confundir con un tercer cuerno.
Ambos sexos tienen un pelaje moteado que usan como camuflaje y que varía ligeramente de color de acuerdo al estado de salud de la jirafa. Por otro lado, su lengua negra puede medir 50 cm y la utiliza para limpiarse las orejas.
Su forma de comunicación es por medio de sonidos que el humano no puede percibir, ya que lo hacen a través del infrasonido, es decir, ondas acústicas que para el hombre resulta imposible escuchar.
Alimentación de la jirafa
Se alimentan de ramas y hojas de árboles, incluso con espinas, ya que su poderosa lengua las permite digerir fácilmente. Debido a que se alimenta de alimentos que contienen agua, puede pasar mucho tiempo sin beber gota de este líquido.
Este animal es selectivo al momento de elegir alimento en épocas de abundancia, por lo que el árbol Acacia es su preferido, pero cuando son temporadas de escasez, se adapta a lo que la naturaleza pueda ofrecerle.
Como todo rumiante posee cuatro estómagos por lo que su digestión es lenta, pero eso no les impide dedicar gran parte de su tiempo a alimentarse, pues lo hacen de 16 a 20 horas al día.
Reproducción de la jirafa
Para tener mejor acceso a las hembras en celo, los machos suelen realizar enfrentamientos con el cuello llamado Necking, donde la mayoría de las veces no son graves, aunque sí pueden ser fatales.
Una vez realizada la cópula, la gestación dura de 14 a 15 meses de donde nace una sola cría. La madre, estando de pie, expulsa el saco embrionario que se rompe tan pronto la cría cae al suelo. Al nacer pueden medir dos metros de altura y pesar de 50 a 55 kg. Pocas horas después, las crías ya pueden correr, aunque suelen alcanzar la independencia hasta los 18 meses que es cuando dejan la leche materna.
Del 25 al 50% llegan a la adultez, por lo que su esperanza de vida oscila entre los 20 y 26 años de edad.
Depredadores de la jirafa
El león representa el mayor peligro para las jirafas. También leopardos, cocodrilos y hienas llegan a atacarlas, especialmente a las crías, a los enfermos o de edad avanzada. No son animales fáciles de cazar, pues su estatura y su habilidad para patear con sus mortales extremidades delanteras, hacen dudar a cualquier depredador de su hábitat.
El hombre por su parte, ha disminuido la cantidad de jirafas en el mundo, debido a la caza furtiva para la obtención de su piel, carne y cola.