INPI reafirma su compromiso por garantizar el pleno ejercicio de los derechos de mujeres indígenas y afromexicanas
- Impulsa acciones comunitarias que promueven una vida libre de violencia de género, con pertinencia cultural y bajo un enfoque de derechos.
Ciudad de México, a 27 de noviembre de 2020.
En el marco de la pandemia, el Instituto otorgó apoyo a las Casas de la Mujer Indígena y Afromexicana, con el propósito de dar continuidad a las actividades de prevención y atención de violencia contra las mujeres.
Este Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) reafirma su compromiso por garantizar el pleno ejercicio de los derechos de las mujeres indígenas y afromexicanas, convencido de la importancia de trabajar en la erradicación de las diferentes expresiones de la violencia de género, por lo que impulsa acciones comunitarias que promueven una vida libre de violencia, con pertinencia cultural y bajo un enfoque de derechos.
La violencia de género es un fenómeno complejo, que a diferencia de la violencia social o la que viven los hombres, está arraigado a la histórica discriminación y desigualdad que enfrentan las mujeres, y que se agudiza en mujeres indígenas, rurales y migrantes, pues enfrentan una triple discriminación por motivos de pobreza, género y etnicidad.
Asimismo, es necesario considerar las condiciones generadas por la emergencia sanitaria por COVID-19, este año es importante redoblar esfuerzos para visibilizar la importancia del derecho a vivir una vida libre de violencia, toda vez que de acuerdo a cifras de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en todo el mundo, una de cada tres mujeres ha vivido violencia física o sexual, además de que, según la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO), la pandemia ha afectado de manera desproporcionada a las mujeres rurales pues cuentan con menos oportunidades, mayor carga de trabajo y sufren de mayor violencia de género.
Bajo este contexto, con la firme convicción de atender la situación de vulnerabilidad de las mujeres indígenas, el INPI otorgó apoyo a las Casas de la Mujer Indígena y Afromexicana, con el propósito de dar continuidad a las actividades de prevención y atención de violencia contra las mujeres indígenas y afromexicanas, salud y partería, en el marco de la pandemia.
Las Casas de la Mujer Indígena y Afromexicana son espacios en los que mujeres indígenas y afromexicanas brindan atención a otras mujeres de sus comunidades, con pertinencia cultural, perspectiva de género y derechos humanos en las vertientes de derechos de las mujeres, prevención de violencia contra las mujeres, derechos sexuales y reproductivos. A la fecha, existen 35 Casas de la Mujer Indígena y Afromexicana, ubicadas en 17 entidades federativas.
La operación de las casas está orientada al desarrollo de acciones de asesoría, orientación, canalización y acompañamiento de casos, e impartición de pláticas y talleres de capacitación en las temáticas referidas. Asimismo, pueden llegar a operar como espacios de estancia temporal de mujeres en situación de violencia, entre tanto se canalizan a un refugio o a la instancia correspondiente.
Por otro lado, el Programa Institucional 2020-2024 del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) alineado al eje 2 “Política social” del Plan Nacional de Desarrollo (PND) 2019-2024; sustentándose en el principio rector de “No dejar a nadie atrás, no dejar a nadie fuera”, se propone implementar acciones afirmativas para garantizar el ejercicio de los derechos de las mujeres y niñas indígenas y afromexicanas.
También busca promover y fortalecer procesos de justicia comunitaria para las mujeres indígenas y afromexicanas e impulsar acciones para promover su participación y representación directa en los diferentes ámbitos donde se toman las decisiones que les afectan.
El INPI reconoce las legítimas demandas de los movimientos y las luchas emprendidos por mujeres indígenas, y hace un llamado a los pueblos indígenas y afromexicano para que aporten la fuerza de su organización comunitaria y emprendan acciones de protección hacia mujeres y niñas, y así sumen a la construcción de un país más justo e igualitario desde las comunidades.
Con información de: https://www.gob.mx/inpi