Oaxaca, 09 de agosto de 2016.- Tres mil empresas en Oaxaca cerraron ayer en protesta por las movilizaciones que llevan a cabo, desde hace casi 3 meses, los integrantes de la Sección 22 de la CNTE, las cuales les ha causado millonarias pérdidas.
Como ya había sido anunciado, a primera hora de ayer inició el paro en la capital oaxaqueña, como parte de una estrategia para exigir la aplicación del Estado de Derecho en la entidad.
En conferencia de prensa, Esther Merino, líder de la Alianza Comercial y Empresarial de Oaxaca, confirmó la participación de tres mil empresas, que comprenden 50 mil empleos en la capital del estado, Puerto Escondido y Huatulco, a fin de evidenciar el hartazgo social que se vive en la entidad debido a las manifestaciones magisteriales.
La actividad tuvo una duración de 24 horas y participaron cámaras empresariales y de servicios, sindicatos de la construcción, músicos, empresas del transporte público y ciudadanía en general, quienes con pancartas en mano manifestaron su malestar a las movilizaciones magisteriales.
Merino instó al secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio, a ir a la entidad para que vea de cerca la situación y su gravedad, a fin de agilizar la solución al conflicto, que, “de continuar, terminará con la actividad económica y comercial que de por sí es pequeña en Oaxaca.
Exigió a Osorio que las mesas de diálogo que realiza con la CNTE, se lleven a cabo en Oaxaca y se dé entrada a la sociedad civil.
PURO TEATRO Y BOICOT
Maestros de la Sección 22 de Oaxaca llamaron a los padres de familia a manifestarse en contra de los empresarios que se fueron al paro de labores, el cual calificaron de “puro teatro”, y pidieron boicotear estos establecimientos y no comprar en ellos.
“Ahora reclaman orden cuando ellos se valen de cualquier acto ilegal para obtener sus permisos; despojan –con la corrupción y complicidad de funcionarios municipales, estatales y federales, y violando las leyes– de espacios que son patrimonio de familias y pueblo oaxaqueño”, dice su comunicado.
Aseguran que padres de familia, pequeños comerciantes y habitantes deben “reportar” a estas empresas que cerraron para “ajustar cuentas con ellos y nunca más compremos en esos lugares”.
Acusaron que estos “empresarios” son “prestanombres” que ni viven y ni son de Oaxaca, “pues como siempre mandaron a sus trabajadores, tan amolados, necesitados y mal pagados como el resto de nosotros, a hacer el trabajo sucio, a confrontarnos pueblo contra pueblo con la amenaza de correrlos”.
Con información de: EL FINANCIERO
