Gobierno y disidentes de FARC pactan abrir diálogo en Colombia
Bogotá, 03 de septiembre del 2023.- Luego de un largo pulso que duró casi un año, el gobierno colombiano y las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) conocidas como Estado Mayor Central (EMC), llegaron ayer a un acuerdo para instalar una mesa de diálogos y negociaciones de paz.
De esta manera, el gobierno del presidente Gustavo Petro abre un segundo frente de conversaciones para poner fin a décadas de alzamiento armado, sumando esta nueva mesa a la ya existente con el Ejército de Liberación Nacional (ELN) desde noviembre de 2022.
Las disidencias del EMC nunca se acogieron a los acuerdos de paz entre las FARC y el gobierno del presidente Juan Manuel Santos, suscritos en 2016, año en el que comenzaron la reconstrucción de frentes guerrilleros en varias regiones del país hasta convertirse en una fuerza irregular con presencia en 15 departamentos y unos 2 mil 500 hombres en armas, según cálculos de fuentes militares.
“Las delegaciones de ambas partes, reunidas en el municipio de Suárez, en el departamento de Cauca, entre el 31 de agosto y el 2 de septiembre reiteran su voluntad de dialogar y crear las condiciones para alcanzar las profundas transformaciones políticas, sociales, ambientales, económicas y culturales que se necesitan para hacer una Colombia más justa y equitativa”, se lee en el documento del acuerdo.
Con el telón de fondo de una enorme operación militar en el mismo departamento donde estuvieron reunidas las delegaciones, las partes expresaron que “instalaremos la mesa de diálogos con toda su arquitectura jurídica y política, con presencia de la comunidad internacional como garantes y acompañantes”.
El convenio, dado a conocer al mediodía de ayer, señala que en breve se anunciarán la fecha y el lugar para el inicio de las conversaciones formales, así como la lista de países garantes y del proceso, aunque ratificaron que las misiones de las organizaciones de Naciones Unidas y de Estados Americanos; la Conferencia Episcopal y el Consejo Mundial de Iglesias serán acompañantes permanentes del proceso.
Impecable logística
Asistentes a la reunión narraron que los tres días de sesiones de trabajo comenzaron en un ambiente más bien frío aunque respetuoso, pero se fueron tornando cálidos hasta alcanzar una atmósfera distendida.
“En el último día se vivió ese ambiente que los españoles llaman ‘buen rollo’, de mucha confianza, con espacio para las risas, un ambiente muy favorable, así que yo diría que lo firmado corresponde a ese estado de ánimo”, contó a La Jornada Yezid Arteta, integrante de la delegación gubernamental recién llegado a Colombia tras 15 años de exilio en España.
Arteta, quien fue guerrillero de las FARC durante 10 años y luego estuvo en prisión durante otros 10, llamó la atención sobre el carácter diverso de la delegación oficial en la que hay coroneles en retiro, empresarios, voceros de fuerzas políticas tradicionales, delegados del movimiento indígena y personas que han trabajado por años en el tema de la paz.
“La guerrilla pudo escuchar las voces de personas que piensan muy distinto y tienen interpretaciones diferentes sobre el conflicto, pero unidas por el propósito de la paz, y eso tal vez les hizo ver que el país no es una vaina monolítica, sino llena de matices”, comentó Arteta, también escritor y experto en resolución de conflictos de la Escuela de Paz de Barcelona.
En la zona montañosa de la cordillera Occidental, donde tuvo lugar el encuentro, tanto la logística como la seguridad estuvieron en manos de las guardias indígenas, campesinas y cimarronas. Los guerrilleros asistieron vestidos de civil y “no se vio ni una sola arma durante los tres días que estuvimos allí”, apuntó el ex combatiente.
“Yo, que anduve tanto tiempo por estas montañas, quedé sorprendido con el nivel de organización de estas guardias que, con sus uniformes y sus bastones, se echaron al hombro semejante logística”, sostuvo.
Sumando delegados del gobierno y de la guerrilla, funcionarios de la ONU, OEA e iglesias, diplomáticos de cuatro embajadas europeas y personal de apoyo, al menos 70 personas estuvieron a cargo de estos cuerpos civiles criticados por sectores políticos que los consideran apéndices de los grupos armados.
Mesa y alto el fuego
En el camino hacia la instalación de la mesa de negociaciones se ajustarán los protocolos para que el gobierno decrete un alto el fuego bilateral con el EMC, al tiempo que se tomarán medidas para aliviar el impacto de la confrontación armada sobre la población civil. La grave situación humanitaria que padecen las comunidades de regiones donde los choques armados han ido en ascenso será atendida con “la creación de ocho misiones humanitarias en los departamentos de Antioquia, Arauca, Cauca Huila, Nariño, Norte de Santander, Putumayo y sur de Bolívar”.
Desde septiembre de 2022, el comisionado de paz, Danilo Rueda, comenzó acercamientos exploratorios con voceros del EMC en la suroriental región del Yarí, a partir de los cuales se fue generando un clima de confianza entre las partes que derivó, a finales de diciembre, en el anuncio del presidente Petro de decretar un alto el fuego por seis meses.
Sin embargo, el asesinato en el Putumayo de tres menores de edad a los que los rebeldes señalaron como desertores, hizo que el gobierno pusiera fin en mayo pasado al cese de operaciones contra el EMC, hecho que mandó al congelador los modestos avances conseguidos hasta entonces.
Con el sonido de las ráfagas y las explosiones haciendo las veces de banda sonora de la búsqueda de la paz, Rueda persistió en su empeño de llegar a una mesa de diálogos y mantuvo sigilosos encuentros con voceros del EMC, en medio de un clima de escepticismo, hasta lograr el acuerdo anunciado ayer.
Con el documento recién firmado en sus manos, el comisionado de paz dijo a La Jornada desde el Cauca que el acuerdo de ayer “es un salto cualitativo en esta construcción de paz con el EMC”, y subrayó que “el centro de las decisiones, en aplicación del DIH, serán las comunidades, las organizaciones de base que padecen la violencia armada”.
Rueda calificó de “fundamental” la presencia de la comunidad internacional en los esfuerzos realizados hasta ahora, destacando que “ellos han sido testigos de la voluntad de paz demostrada por las partes”
Además de enfrentar a las fuerzas militares, las guerrillas del EMC sostienen una cruenta confrontación con otras disidencias de las antiguas FARC, llamadas Segunda Marquetalia, así como con frentes del ELN, que ha dejado centenares de muertos.
La estrategia total
Según Comunes, el partido surgido de los acuerdos de paz de 2016, las disidencias son responsables del asesinato de varios de los 396 ex combatientes caídos en los recientes siete años, y del desplazamiento forzado de centenares de sus militantes.
Expertos en el tema de las negociaciones de paz opinaron que si el acuerdo anunciado ayer cumple las etapas previstas, el gobierno habrá dado un importante paso en su estrategia de “paz total”, una de las principales banderas del presidente Gustavo Petro.
Con información de: https://www.jornada.com.mx/