Geoparques de México, territorios de importancia geológica, biológica, ecológica, hídrica, arqueológica y cultural
- Comarca Minera de Hidalgo y Mixteca Alta de Oaxaca advierten sobre los desafíos del cambio climático y de la acción humana.
- Las dos primeros geositios mexicanos reconocidos por la UNESCO requieren recursos para ser ratificados en 2021.
La Comarca Minera de Hidalgo y la Mixteca Alta del Estado de Oaxaca, territorios de importancia geológica, biológica, ecológica, hídrica, arqueológica y cultural, son dos de los ocho sitios reconocidos en 2017 como Geoparques Mundiales de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
Foto: Geoparque Mundial Comarca Minera, Hidalgo, México. UNESCO Secretaría de Turismo y Cultura de Hidalgo
Aunque desde 1999 se propuso la creación de un programa de geoparques global, surgió primero, en 2000, la Red de Geoparques Europeos y hasta 2004 se creó la Red Global de Geoparques. El 17 de noviembre de 2015 los 195 estados miembros del organismo internacional ratificaron la creación de los Geoparques Mundiales de la UNESCO, la instancia que verifica la importancia de la gestión de los sitios geológicos y paisajes destacados de manera integral.
En todo el mundo ostentan esta categoría 127 zonas de 35 países y cada una revela misterios de la Tierra acontecidos a lo largo de 4 mil 500 millones de años que han cincelado la fisonomía del planeta, tanto por los cambios climáticos ocurridos como por la acción del ser humano. Las huellas que resguardan advierten a la humanidad sobre los desafíos que representan fenómenos naturales de gran magnitud como erupciones volcánicas, terremotos, tsunamis y geohazards, entre otros.
Los geositios, llamados así para fines turísticos y educativos, se insertan en el Programa Geoparques Mundiales, cuya categorización, al igual que las de Patrimonio Mundial y de Reservas de la Biosfera, también de la UNESCO, busca promover la conciencia ambiental, en este caso sobre la geodiversidad, con el fin de adoptar mejores prácticas de protección, educación y turismo, enfocado todo ello al logro de los Objetivos de desarrollo del milenio, particularmente el número 7.
Foto: Geoparque. Mirador las conchas
El reconocimiento de los dos primeros geoparques mundiales mexicanos participa en esa estrategia. La Comarca Minera de Hidalgo muestra la huella de la minería no sólo en el paisaje modificado, sino también en un rico patrimonio industrial que incluye espléndidas haciendas. Abarca nueve municipios: Pachuca de Soto, Mineral de Reforma, Mineral del Chico, Mineral del Monte, Omitlán de Juárez, Epazoyucan, Singuilucan, Atotonilco el Grande y Huasca de Ocampo, donde residen 500 mil habitantes, de los cuales cerca de 11 mil son hablantes de náhuatl y otomí.
Foto: Geoparque Mundial Comarca Minera, Hidalgo, México. UNESCO Secretaría de Turismo y Cultura de Hidalgo
Peñas, calderas, domos y los prismas basálticos más altos del mundo (40 metros de altura) en Santa María Regla, entre otras geoformas volcánicas, dan evidencia de la transformación de las rocas como una alteración natural, un histórico proceso geológico de metamorfosis, además de alteraciones al entorno ocasionadas por 400 años de actividad minera en la región, principalmente en el distrito Pachuca-Real del Monte, de donde se extrajo el 6% del total de la plata producida en el planeta entre los siglos XVI y XX. Su notable potencial geológico atesora también depósitos de oro, tridimita y cristobalita.
El Geoparque Mundial Mixteca presenta un color de tierra peculiar y una orografía accidentada de rocas caprichosas como el mirador Los Dos Corazones. Consta de nueve municipios: Santo Domingo Yanhuitlán, San Andrés Sinaxtla, San Bartolo Soyaltepec, San Juan Teposcolula, San Juan Yucuita, San Pedro Topiltepec, Santa María Chachoapam, Santiago Tillo y Santo Domingo Tonaltepec. En tres de ellos se asientan las etnias chinanteca, mixe, mazateca, zapoteca y mixteca.
Foto: Geoparque, Mirador los dos corazones
Abarca 415 km2, con al menos 37 sitios de importancia histórica, geomorfológica, paleontológica y tectónica, lo que resulta sumamente atractivo para la difusión de las ciencias de la Tierra y para comprender la evolución terrestre. Abriga impresionantes procesos de erosión y accidentes geográficos, así como depósitos ligados al uso intensivo de una agricultura milenaria, además de resguardar sitios de importancia prehispánicos, coloniales y contemporáneos arqueológicos y culturales, entre ellos dos ex conventos de la Ruta Dominica: Santo Domingo Yanhuitlán y San Pedro y San Pablo Teposcolula.
Foto: Geoparque. mirador Sta. Maria Pooltepec
En 2004, el hoy Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático encargó a la experta Celia López Miguel el estudio “El establecimiento de Geoparques en México: un método de análisis geográfico para la conservación de la naturaleza en el contexto del manejo de cuencas hídricas”, donde la científica destaca que el Programa Geoparques “significa una alternativa con grandes posibilidades de éxito para el territorio mexicano porque permitiría integrar al Sistema de Áreas Naturales Protegidas nuevos territorios que exhiben una serie de características biofísicas y socio-culturales excepcionales.”
Foto Geoparque. Sitio Boquerón
López Miguel recomienda aplicar un enfoque participativo, así como evaluar y definir un gran número de áreas del territorio nacional que presentan gran susceptibilidad a la degradación y están siendo afectadas por procesos ambientales muy severos, como el Nevado de Toluca, el Pico de Tancítaro y el Volcán Paricutín, La Malinche y el volcán Tacaná, entre muchos otros paisajes no volcánicos que cabrían en el programa.
En efecto, por ser indispensable garantizar la participación de la ciudadanía para gestionar ante la UNESCO la homologación de los geoparques mundiales y desarrollar además un esquema de aprovechamiento sustentable de los recursos, especialistas de los Institutos de Geofísica y Geografía de la Universidad Nacional Autónoma de México y del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social integraron la investigación de campo, en acuerdo y con la colaboración de autoridades municipales y pobladores de las comunidades que integran la Comarca Minera de Hidalgo y la Mixteca Alta de Oaxaca.
Foto: Geoparque. Cerro Verde
José Luis Palacio Prieto, investigador del Instituto de Geografía y coordinador de promoción del Geoparque Mixteca Alta, indica que “la designación de la UNESCO a ese tipo de territorios no es común por partida doble: México presentó un par de candidaturas, las cuales fueron aprobadas”. Anunció que ahora se trabaja en la construcción de una Red Latinoamericana de Geoparques.
El pasado 9 de mayo, la Comisión Permanente del Honorable Congreso de la Unión exhortó a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público a prever una partida especial en el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2018, destinada a los “Geoparques Mundiales de la UNESCO” Comarca Minera del Estado de Hidalgo y de la Mixteca Alta del Estado de Oaxaca, con el fin de que puedan desarrollar un proyecto sustentable holístico y logren ser ratificados como tales en 2021.
A las instituciones de los tres niveles de gobierno, el órgano legislativo los conminó a generar programas e instrumentos para garantizar la ratificación de ambos geositios como Geoparques Mundiales de la UNESCO e impulsar acciones de gobierno tendientes a lograr el desarrollo y la sustentabilidad en beneficio de los habitantes de esas zonas geográficas.
Con información de: https://www.gob.mx/semarnat/