Ecologia

Fórmula 1, ciencia, tecnología y ecología

Las carreras de Fórmula 1 generan un derroche de tecnología, respaldada por can- tidades exorbitantes de dinero. Debido al gasto de combustible, con sus consecuen- tes emisiones de dióxido de carbono y desperdicio de energía, los organizadores del deporte están desarrollando otra visión.

 

Ahora se han propuesto que los motores de estos autos, que son los prototi- pos en los que se basa la industria automotriz para sus futuros diseños, sean más eficientes y menos contaminantes.

 

En los autos de la Fórmula 1, dos terceras partes de la energía que se obtie- ne al quemar el combustible se pierden en la forma de calor, que se disipa en la atmósfera; esto es así porque cada vez que el piloto frena, la energía mecánica se convierte en calor.

 

A partir del 2009, los automotores que participen en estas carreras deberán contar con un “sistema de recuperación de energía cinética”. La energía que se li- bera al frenar se transformará en energía eléctrica, que se almacenará en baterías o capacitores. Esta energía recuperada dará mayor potencia al motor y mejorará su desempeño al acelerar en las curvas o al rebasar, lo que suscitará mayor emoción en los aficionados. A los promotores les interesa mostrar que la velocidad no está reñida con la ecología.

400 Pequeñas Dosis de Ciencia UNAM

Botón volver arriba