Exigen no simular equidad de género
Ciudad de México, 07 de febrero del 2021.- Ante la obligación de los partidos de postular mujeres en el 50 por ciento de las candidaturas, promotoras de la equidad de género piden a las fuerzas políticas no dar la vuelta a la ley con la imposición de incondicionales, parientes o aspirantes «famosas», cuyo nombre sólo será utilizado con fines de rentabilidad electoral.
En medio del proceso de selección de más de 21 mil candidatos y candidatas a cargos de elección popular, tres senadoras de distintos partidos expresan su preocupación ante la posibilidad de que la agenda de género quede ausente en la contienda o que se repitan viejas prácticas, como traspasar candidaturas entre familiares y marginar a cuadros militantes.
También alertan sobre la promoción de actrices, cantantes y deportistas, cuya fama podría ser utilizada por las dirigencias de los partidos políticos para atraer votos, conseguir un mayor porcentaje en las urnas y, con ello, más diputaciones plurinominales que son repartidas entre las mismas cúpulas.
A pesar de la equidad obligada por ley, advierten sobre la prevalencia de una visión patrimonialista para decidir sobre postulaciones, ya que son los hombres quienes dominan las instancias en las que se decide qué mujeres van y qué mujeres no.
Entrevistadas por separado, coinciden en que las mujeres que obtengan una candidatura o ganen la elección, deberán pelear por su derecho a decidir y no prestarse sólo para la foto de campaña.
Hasta ahora, partidos como Morena, PRI, PAN, PRD, MC y PVEM, así como las fuerzas políticas de nueva creación, han placeado, mencionado o registrado en sus procesos internos a personalidades del espectáculo y del deporte.
Uno de los casos más polémicos fue el de Francisca Viveros, cuyo nombre artístico es «Paquita la del Barrio», cantante de música popular, que será postulada por Movimiento Ciudadano como candidata a diputada local, por el distrito 8 de Misantla, Veracruz.
«No sé a qué vengo aquí, yo sólo sé que hay personas atrás de mí que son las que me van a enseñar cómo manejar este asunto», confesó durante el acto público en el que fue presentada.
A la intérprete se suma, por ejemplo, la pretensión del PRI, PAN y PRD de postular a la Miss Universo 1991, Lupita Jones, como candidata a la gubernatura de Baja California, aunque hasta ahora no se ha concretado la designación.
En días recientes han sido mencionados los nombres de las actrices Gabriela Goldsmith, como aspirante a una diputación federal por Morena; Malillany Marín, quien buscaría la Alcaldía de Miguel Hidalgo, por el partido Redes Sociales Progresistas (RSP), y Sugey Abrego, quien tiene intenciones de convertirse en Alcaldesa de Benito Juárez, por el PVEM.
Para la presidenta de la Comisión de Igualdad de Género del Senado, Martha Lucía Mícher, en los partidos políticos se ha desarrollado una tendencia al «mujerismo», que consiste en cumplir con la paridad, a cualquier costo, sin pensar en el perfil de las candidatas ni en la agenda que defenderán.
De manera particular, se refiere a la polémica de las últimas semanas: la eventual postulación de cantantes, actrices, conductoras, deportistas y hasta empresarias de concursos de belleza.
«Son mujeres que gozan de una muy buena fama por artistas, por deportistas, que además se lo han ganado y se lo han ganado muy bien, pero eso más bien son mujerismos, eso es mujerismo, no es un compromiso con la igualdad.
«Tengo la preocupación de que, sin querer, caigamos en mujerismo de decir: ¡traigan mujeres! Y yo tengo un lema: presencia de mujer no garantiza conciencia de género, ¿qué quiere decir?, que han pasado por la historia de este País muchísimas mujeres y la vida de las mujeres no ha cambiado.
«Entonces esa es mi preocupación y a mí me parece que los partidos pequeños tienen el derecho de invitar a quien quieran, pero no se vale echar mano de todo y no estar comprometidos con los derechos humanos de las mujeres e invitar a gente que lo que menos le interesa es cambiar la vida de las mujeres», dice.
La legisladora alerta sobre el riesgo de que los propios partidos políticos sólo utilicen el nombre de «famosas», pero que, en los hechos, no se defiendan los derechos de las mujeres que se han peleado a lo largo de décadas «a codazos» y «sentenciazos».
«Esto es lo que tienen que tomar en cuenta las mujeres que acepten una candidatura; qué bueno que tengan la fama que tienen, pero ellas tienen que estar conscientes de que no se mal utilice su fama, que estén con la gente, con las mujeres, para eso queremos la paridad, no nada más para tener mitad y mitad».
La política morenista urgió a las fuerzas políticas a tomar en cuenta a los cuadros militantes que tienen trabajo de partido y de territorio, ya que, en muchas ocasiones, quienes llegan como externas, carecen de compromiso.
Como ejemplo, se refiere al voto que algunas morenistas han dado en legislaturas locales para frenar derechos de las mujeres.
«Todas las mujeres tienen derecho a participar, pero sí es cierto que hay que cuidar mucho a los cuadros internos que se han llenado los pies de polvo, que han hecho ganar a muchas candidatas y candidatos, hay que buscar el equilibrio.
«¿Que quieren los partidos? Ganar, tener más votos, sí, pero no a costa de cualquier personaje, no a costa de que se sacrifiquen los principios de un partido, los criterios de un partido.
«Hay que ver a algunas candidatas que no están comprometidas o que no estaban comprometidas con Morena. Todavía en los congresos locales se sigue criminalizando a las mujeres con votos de Morena, entonces eso es muy peligroso».
Mícher demanda poner fin al tráfico de candidaturas entre familiares, parientes y allegados, que ha sido utilizado para cumplir con las cuotas de género en diversos procesos electorales.
«Pero que ahora resulta que el Presidente Municipal va a poner a su esposa, para que siga el mismo grupo, que el diputado federal ahora pone a su hija, ¿qué, de verdad, no hay mujeres en todo el País?»
Al hablar sobre la postulación de candidatas «famosas», la diputada Martha Tagle considera que los partidos recurren a esos perfiles por «rentabilidad electoral».
La legisladora lamenta que, en lugar de tomar en cuenta los méritos de militantes, las dirigencias actúen de manera pragmática y hasta hagan negocios.
«Los personajes famosos no sólo son mujeres, también hay hombres, pero ese tema tiene que ver con que están buscando votos, rentabilidad. Es como, incluso, llegar a un acuerdo con ellos, no sé si de tipo económico, para que presten su imagen y terminen dándole el voto a los partidos.
«Además, los diputados que llegan por la vía plurinominal, que son los diputados de partido, utilizan esas figuras para que atraigan votos y ellos lo que van a garantizar, a final de cuentas, son votos para que lleguen diputados plurinominales.
«Lo que sí es lamentable es que no consideren rentables a las mujeres de los propios partidos. Sí se da mucho más en el caso de las mujeres que, aunque tengan experiencia, trayectoria, trabajo eso no lo consideran rentable.
«Lo rentable es que tengas dinero y que te conozca la gente, es como las dos mediciones que los partidos tienen y no les importa si se trata de una mujer que ha tenido muchos años de trayectoria política, que ha dado muestras con su trabajo.
«No se pone de por medio el tema de la meritocracia, que sean personas serias, con trayectoria, comprometidas, que conozcan. Por ejemplo, Paquita la del Barrio, ella misma declaró que no sabe nada, pero que irá aprendiendo.
«La mujer, como cantante, como artista, todo nuestro reconocimiento, pero para llegar a un cargo público se tiene que valorar lo que significa ser un servidor público. Cuando se ponen este tipo de candidaturas se devalúan, de por sí, los diputados».
Por otro lado, Tagle advirtió que las cúpulas de los partidos políticos, dominadas por hombres, son las que determinan qué mujeres van y qué mujeres no van en las candidaturas a cargos de elección popular.
«Ellos se sienten dueños de las sillas, de los espacios, de los cargos y hay una especie de cacicazgos. Ellos se consultan entre hombres a qué mujer van a poner, hacen la distribución por estados, distritos y municipios, incluso piensan en los menos rentables, ahí hacen consulta con los hombres para ver qué mujeres ponen.
«Y ponen a las mujeres más cercanas a sus proyectos, a las que puedan seguir manipulando; mujeres, a través de las cuales, ellos sigan teniendo la última palabra. Esos hombres, que tienen el control en sus estados, son los que definen quiénes llegan y si la mujer tiene trayectoria, la dejan pasar, pero condicionándola a formar parte de su equipo, de su proyecto, de su disciplina y es porque ellos siguen controlando el tema del registro de las candidaturas».
En entrevista, la diputada de Movimiento Ciudadano sostiene que una mujer con aspiraciones a un cargo de elección popular tiene que enfrentar los arreglos partidistas dominados por dirigentes, alcaldes, gobernadores y hasta por el propio Presidente.
«Hay que ver el caso de Félix Salgado, en Guerrero. Las mujeres de Morena pueden estar muy en contra, pero el Presidente ya decidió que es su amigo y cree que le levantan falsos. Entonces, en las candidaturas, es un hombre el que toma las decisiones», señala.
Según Tagle, las fuerzas políticas tampoco apoyan financieramente las campañas de las mujeres o, por lo menos, no en la proporción que lo hacen con los hombres.
En medio de los procesos de selección de todas, alerta sobre la existencia de presiones y exigencias de carácter sexual a las que también son sometidas las mujeres con aspiraciones.
«Sin duda es muy latente el caso de las mujeres políticas a las que también se les exigen o condiciona a algún asunto sexual. Y las mujeres lo viven en solitario, son casos dolorosos de mujeres a las que se les ha condicionado la candidatura a un tema sexual».
Kenia López, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado, advierte que, al margen de la profesión de las eventuales candidatas, lo importante es garantizar que cuenten con una propuesta para responder en el cargo, ejerzan su derecho a tomar decisiones y no se presten sólo para la foto de campaña.
«Más que cuestionar si es un asunto de alguna persona pública y eso, más bien el cuestionar qué tanta experiencia tiene para tomar decisiones. No me gustaría pensar que es un asunto de que Paquita la del Barrio no va a poder o que Lupita Jones no va a poder, más bien el tema es ¿cuál es su propuesta?
«Tengas la carrera que tengas, seas reggaetonera, bailarina, actriz, lo que sea, cantante, pues que sean ellas las que vayan tomando decisiones en beneficio de los mexicanos. Que no se dejen manipular, que no se dejen influenciar, que no se dejen solamente poner para la foto, pero no tomar las riendas de los cargos», asevera.
«Ojalá y las mujeres, esas mujeres que se están postulando, tomen decisiones ellas, que sean ellas las que, en función de su conocimiento y su lucha personal, puedan ejercer el cargo, que no haya personas detrás de ellas, que sean los operadores o los constructores de cosas y no los responsables.
«No me quiero imaginar a una gobernadora o a una alcaldesa, para continuar con los estereotipos o para continuar con los roles masculinos históricos, en los que las decisiones las toman ellos y no ellas».
Tras recordar que, en el pasado, los partidos ya postularon a «famosas» como Silvia Pinal, Irma Serrano o Carmen Salinas, la legisladora del PAN coincide en que los partidos apuestan a la rentabilidad política.
Sin embargo, pide que se apliquen suficientes filtros para no entregar candidaturas a «impresentables».
«Tiene claramente una connotación más de rentabilidad política que de otra índole y eso es lo que los partidos políticos están obligados a verificar.
«En pleno siglo XXI, con una cantidad de información tan alta para los electores, con una cantidad de personas competentes, que pueden estar en espacios públicos, estoy convencida de que los partidos políticos no deberían tener impresentables en las boletas y eso tiene que ver no con tu carrera si no con tu trayectoria personal.
«¿Que beneficio le puede generar un dentista, un futbolista o un cantante de reggaetón? ¿Qué beneficio público podría tener? ¿Cuál es el resultado que se le dará al ciudadano? Ese es el tema de fondo».
Aurora Aguilar Rodríguez, directora General del Centro de Estudios para el Logro de la Igualdad de Género, advierte que mientras las mujeres han dado la pelea para defender sus derechos y plasmarlos en la ley, los partidos políticos buscan la manera de darle la vuelta para no cumplir.
«Nosotros avanzamos en el carril de la regulación, de la normatividad, de la ley, y los partidos políticos avanzan por sus carriles de sus componendas, de sus amiguismos y de sus grupos políticos y entiendo de política, pero tiene que haber ahí un apego al espíritu de la normatividad y no andar buscando como darle la vuelta», expresa.
En entrevista, reconoce que, a pesar de los avances, prevalecen viejas prácticas como colocar candidatas en función de la incondicionalidad de los dirigentes.
«Es una manera de los jerarcas de seguir ocupando los espacios a través de mujeres, es decir, por supuesto que las cuotas de género ayudan, porque abren los espacios para la participación de las mujeres pero, hoy que están obligados por ley a que participen mujeres, prefieren poner mujeres incondicionales y eso se ve en todos los partidos», denuncia.
«Difícilmente se encuentra un partido en el que la meritocracia impere en la repartición de candidaturas».
Aguilar Rodríguez alerta además sobre el riesgo de que los partidos asignen a mujeres las candidaturas de distritos o estados donde son poco competitivos, por lo que será necesario mantenerse vigilante para evitar esa inequidad.
«Lo seguimos viendo, distritos tradicionalmente competitivos se lo siguen otorgando a varones. Tendremos que hacer esos análisis porque hoy estamos viendo que la igualdad sustantiva sigue siendo francamente muy complicada», señala.
Con información de: https://www.reforma.com/