¿Estás todo el tiempo cansada? Tómate un minuto para averiguar por qué
En todos lados se habla de higiene del sueño. Por supuesto que nadie es perfecto, pero tú intentas hacer todo lo posible por ser un reloj con tus horas de acostarte y levantarte. Salvo algún fin de semana muy frenético o la cansadora época navideña, estás en tu cama para las diez de la noche y logras estar fuera a las seis.
Si esto es así, entonces ¿por qué estás tan cansada? Esta debe ser la pregunta que más ronda tu cabeza cuando estás trabajando, jugando con tus niños o en alguna reunión de amigas y lo que más quieres es volver a tu casa a dormir una siesta. Por lo menos media hora. No, media no sería suficiente. Una, dos.
En realidad, sabes que si pudieras, te acostarías a las cinco de la tarde para levantarte doce horas después. Sin embargo, por cansada que estés, muchas veces no puedes dormirte. Te digo más: la cantidad de horas que duermas, lamentablemente, no influye en nada en tu cansancio, ¿no es verdad?
El cansancio inevitable: ¿qué es el síndrome de fatiga crónica?
Si duermes mucho, pero sigues cansada, si te cuesta razonar o memorizar como lo hacías antes, si tienes dolores que parece que salen de la nada, si te duele muchas veces la cabeza y si todos estos síntomas empeoran después de que te exiges mental o físicamente, puedes estar conviviendo con el síndrome de fatiga crónica.
Según la Mayo Clinic, este es un trastorno complejo, en que el cansancio no puede ser atribuido a una enfermedad. A veces se usa el término encefalomielitis miálgica; el síndrome es el mismo.
Como explica la respetada clínica, una de las causas de este síndrome puede ser una infección viral. Muchas personas que se recuperaron de este tipo de enfermedades desarrollan el síndrome después. Sin embargo, todavía no se ha encontrado el vínculo.
El síndrome de fatiga crónica también puede tener que ver con desequilibrios hormonales. En este caso, los desequilibrios se producirían en las hormonas segregadas por la hipófisis, el hipotálamo o las glándulas suprarrenales.
Los síntomas del síndrome de fatiga crónica pueden ser iguales a los de otras condiciones, como depresión, falta de sueño, o insomnio, e incluso obesidad. Por eso, es importante no diagnosticarte y hablar con tu médico antes de tomar decisiones para mejorar tu fatiga.
¿Qué puedes hacer para mejorar tu condición?
No hay un remedio que a todas las personas con fatiga crónica les sirva de igual manera. Cada caso es único, y quizá necesites adoptar estrategias diferentes para combatirla. Jennie Gough, nutricionista, habló para Women’s Health sobre esto y compartió algunas estrategias para hacer frente a este cansancio constante.
Duerme 8 horas
No importa que el sueño no solucione tu cansancio; dormir lo suficiente puede ayudarte a estar más descansada al día siguiente, aunque no haga que la fatiga se vaya completamente. Pero debes hacer todo lo posible por mantener la consistencia, aunque eso implique cancelar o decir que no a salidas nocturnas.
Come más veces
Comienza a agregar más snacks a tu dieta diaria. «Comer cada tres o cuatro horas puede ayudar a reducir los antojos de azúcar, y a prevenir las caídas del azúcar en sangre que estresan a tu cuerpo y te hacen sentir aun más cansada», explica Gough. Mantener una dieta balanceada que funcione para tus necesidades también puede ayudar.
Controla tu estrés
¿Recuerdas que una de las causas de la fatiga crónica es el desequilibrio hormonal? Cuando estás bajo repetidas situaciones de estrés, tu cuerpo segrega cortisol; después de un tiempo, la respuesta de estrés del cuerpo se avería y se segrega mucha más cantidad de esta hormona. Del dicho al hecho hay un gran trecho, pero para comenzar a reducir el estrés puedes intentar algunas terapias: desde técnicas de relajación hasta terapia psicológica, todo puede ayudar.
Comienza tu tratamiento ya
La Mayo Clinic afirma que, aunque puedas promover varios cambios en tu vida para disminuir el cansancio, consultar al médico es lo más importante. Para prepararte para la consulta, pueden ser útiles estos consejos:
- Haz una lista. Anota en detalle todos tus signos y síntomas para no olvidarte de nada. La fatiga podrá ser lo más difícil de sobrellevar en el día a día, pero también es importante que le comentes al médico sobre tu dolor de cabeza y tus ganglios inflamados.
- Ten en cuenta tu información de salud. Dile al médico si tomas otros medicamentos o si tienes otras enfermedades que puedan tener su influencia en tu condición.
- Lleva compañía. Si estás constantemente fatigada y te cuesta concentrarte, quizá te sea difícil recordar todo lo que el médico te dijo o toda la información sobre tu condición. Tu acompañante puede ayudarte a procesar todo lo que el médico te diga, después de la consulta.
Con información de: https://www.vix.com