Estas son 5 maneras en las que puedes modificar tu cena si quieres adelgazar
20 de enero de 2017.- Cenar es una de las actividades más satisfactorias que puedes hacer al caer la noche, pero también una de las que más te puede complicar para perder peso. Y es que ingerir demasiada comida antes de irte a la cama puede dificultarle a tu cuerpo digerir y procesar todo de forma adecuada.
Lo peor es que cenar mucho y mal es algo que la gente hace comúnmente. ¿Por qué? Torey Armul, portavoz de la Academy of Nutrition and Dietetics, afirma que las personas tienden a tener más apetito emocional al final del día del que poseen en la mañana, cuando su cabeza está “limpia”.
#1 Haz la porción más pequeña
La cena no debe ser tu comida más grande del día, a menos que tengas programado un entrenamiento vigoroso con el cual quemar esas calorías. Así que lo mejor es que tomes un plato pequeño y te sirvas una porción más chica de lo que desayunaste y almorzaste.
#2 Llena el plato sabiamente
Llena la mitad de tu plato con verduras (que son bajas en calorías, y altas en fibras y nutrientes); una cuarta parte cólmala de proteína magra -pescado, pollo, carne de res o de cerdo-; y el otro cuarto con un almidón con grandes cantidades de fibra, como las papas.
#3 Come un aperitivo en la tarde
Para evitar atiborrar tu plato en la cena, trata siempre de comer una merienda pequeña un par de horas antes. Tienes muchas opciones, como ¼ de taza de requesón con fresas en rodajas; ½ taza de yogurt sin grasa; 10 almendras o nueces de la India; un plato de zanahorias o apio.
#4 Toma algo caliente antes de cenar
Un estudio publicado en la revista Appetite afirma que las personas comen menos si antes toman una bebida caliente o una sopa. Lisa Cimperman, dietista clínica, piensa que eso podría deberse a que comer este tipo de alimentos lentamente, mientras se enfrían, le da al cuerpo el tiempo suficiente para sentir satisfacción. Elige un té de jengibre o un caldo de verduras.
#5 Planea la cena
No dejes que tu apetito nocturno te gane y termines comiendo alimentos chatarra que arruinan tu peso (por no tener algo saludable en casa). Planea cada cena lo más anticipadamente que puedas. Los fines de semana prepara arroz o verduras hervidas, por ejemplo, y cómelas durante la semana.
Estos pequeños cambios en tus cenas no son nada complicados, y sí muy benéficos para tu dieta. ¡Anímate a hacerlos!
Con información de: http://www.vix.com/