Empleos con bajos salarios ponen en riesgo el crecimiento económico de México: CEESP
Ciudad de México, 22 de mayo de 2016.- En los últimos años se observa una tendencia hacia la concentración de los empleos en los niveles salariales más bajos lo que pone en riesgo la permanencia de la dinámica del consumo reduciendo la posibilidad de un mayor ritmo de avance de la economía en los próximos años, advierte el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), y destaca la necesidad de inversión como la principal fuente de generación de empleos de calidad y la mejor forma de reducir la pobreza.
Tras reconocer que el aumento de la población ocupada ha venido incidiendo positivamente en el dinamismo que mantiene el consumo desde el año pasado, el CEESP señala que “es indispensable ampliar la ocupación y mejorar sus condiciones laborales de tal manera que haya más puestos de trabajo mejor remunerados, lo que sólo se puede lograr con importantes incrementos en la inversión y en la productividad”.
En el primer trimestre del año la población ocupada total del país sumó 50 millones 778 mil 629 personas, lo que significó un aumento de 972 mil 565 ocupados respecto al mismo periodo del año pasado. No obstante, el aumento en la demanda de empleo ha propiciado una disminución de los salarios que se ofrecen, por lo que la necesidad de la población la lleva a aceptar empleos mal pagados
El CEESP expone que los empleos que se han generado se concentran en los niveles salariales más bajos, agudizando la precariedad del mercado laboral y poniendo en riesgo la permanencia de la dinámica que muestra el consumo.
Del total de ocupados reportados en el último año, un millón 237 mil 127 personas se ocuparon con ingresos de hasta un salario mínimo y un millón 222 mil 635 lograron ingresos de más de uno y hasta dos salarios mínimos. Quienes consiguieron colocarse con ingresos de más de dos y hasta tres salarios mínimos solo fueron 308 mil 189 personas. El universo de personas que perciben ingresos superiores a tres salarios mínimos se redujo en un millón 405 mil 436, señala en su comentario semanal sobre la actividad económica.
“De mantenerse esta tendencia en el mercado laboral, es probable que en el mediano plazo disminuya el dinamismo del consumo, reduciendo la posibilidad de un mayor ritmo de avance de la economía en los próximos años”, advierte.
Mientras que las necesidades de la población son evidentes, los incentivos para invertir y generar empleos son limitados. “Bajo crecimiento económico, ausencia de estado de derecho, corrupción, impunidad, inseguridad, exceso de regulación y otros factores más que siguen ganando terreno y limitando la posibilidad de un entorno más amigable para los negocios. Hay que insistir en que la inversión es la principal fuente de generación de empleos de calidad y la mejor forma de reducir la pobreza”, señala el CEESP.
Con información de: EL FINANCIERO