El Papa Francisco llegó a Cuba
La Habana, 19 Sep (Notimex).- En su primer discurso en La Habana, el Papa Francisco instó hoy a los políticos cubanos a continuar avanzando en el proceso de acercamiento con Estados Unidos, por el bien de su pueblo y de todo el continente americano.
Tras ser recibido con honores militares por el presidente cubano Raúl Castro, en el aeropuerto internacional José Martí, el Papa participó en una ceremonia de bienvenida y en su mensaje dijo sentirse “lleno de esperanza” por el proceso de normalización en las relaciones de los dos pueblos, tras años de distanciamiento.
“Es un signo de la victoria de la cultura del encuentro, del diálogo, del sistema del acrecentamiento universal (…) por sobre el sistema, muerto para siempre, de dinastía y de grupos”, dijo, hablando en español y parafraseando a Martí.
“Animo a los responsables políticos a continuar avanzando por este camino y a desarrollar todas sus potenciales, como prueba del alto servicio que están llamados a prestar a favor de la paz y el bienestar de sus pueblos, de toda América, y como ejemplo de reconciliación para el mundo entero”, añadió.
“El mundo necesita reconciliación en este ambiente de Tercera Guerra Mundial que se está viviendo”, enfatizó el líder de la Iglesia Católica.
Al principio de su discurso pidió a Castro que transmita sus sentimientos de “especial consideración y respeto” a su hermano, el líder cubano Fidel Castro, y agradeció a todos los que se esmeraron para preparar su visita.
También envió un saludo especial a todas aquellas personas que, por diversos motivos, no podrá encontrar durante su estancia en la isla y a todos los cubanos dispersos por el mundo.
Más adelante, el jerarca de la Iglesia Católica constató que en este año 2015 se celebra el 80 aniversario del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre Cuba y El Vaticano; y evocó los viajes de sus predecesores: Juan Pablo II y Benedicto XVI.
Aseguró que con su visita se renuevan los “lazos de cooperación y amistad” para que la Iglesia “siga acompañando y alentando” al pueblo cubano en sus esperanzas y en sus preocupaciones, con libertad y con los medios y espacios necesarios para llevar el anuncio del reino hasta las periferias existenciales de la sociedad.
Recordó otra efeméride, ya que su gira coincide con los 100 años de la declaración de la Virgen de la Caridad del Cobre como patrona de Cuba por Benedicto XV.
“Desde entonces, ella ha acompañado la historia del pueblo cubano, sosteniendo la esperanza que preserva la dignidad de las personas en las situaciones más difíciles y abanderando la promoción de todo aquello que dignifica al ser humano”, estableció.
“En estos días tendré ocasión de ir al Cobre, como hijo y peregrino, para pedirle a nuestra madre por todos sus hijos cubanos y por esta querida nación, para que transite por los caminos de justicia, paz, libertad y reconciliación”, anticipó.
Citó a Juan Pablo II, que en su viaje de 1998 a la isla pidió que Cuba se abra “con todas sus magníficas posibilidades” al mundo y que el mundo se abra a Cuba.
Destacó que geográficamente Cuba es un archipiélago que mira hacia todos los caminos, con un valor extraordinario como “llave” entre el norte y el sur, entre el este y el oeste. “Su vocación natural es ser punto de encuentro para que todos los pueblos se reúnan en amistad”, apuntó.