El IAGO revisará las convergencias entre obras de Francisco Toledo y Franz Kafka
Ciudad de México, 04 de junio del 2024.- Transmitir el entusiasmo de acceder a la obra de Franz Kafka y la curiosidad por conocer la forma en que muestra el alma de sus personajes es la finalidad de las actividades con las que el Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca (IAGO) conmemorará al escritor checo en su centenario luctuoso, que se cumple hoy, coincidieron Karina Sosa y Pergentino José Ruiz. Ambos escritores destacaron en entrevista con La Jornada lo que unió al artista Francisco Toledo, fundador del IAGO, con Kafka, como el ejercicio de la voluntad creativa permanente y la forma en que el también activista oaxaqueño intervino el imaginario kafkiano por medio de sus creaciones artísticas.
Como parte de un mes que la institución oaxaqueña dedica al autor de La metamorfosis, el próximo jueves se realizarán una tertulia y una conversación en la sede Juárez del IAGO, donde además de Sosa y José, participarán Antonio Vásquez y Araceli Mancilla Zayas. Toledo realizó una carpeta gráfica en torno al relato Informe para una academia, del escritor checo, y profesó su admiración por la obra literaria de Kafka, quien nació en nació en Praga en 1883 y murió, a los 40 años (1924), en Kierling, Austria. El poeta zapoteco Pergentino José Ruiz explicó que la conversación que desarrollarán es un acercamiento a los escritos de Kafka.
“La idea fue tener un acercamiento a esa vasta obra narrativa del checo y acercar a los lectores oaxaqueños a lo que representa, desde sus relatos hasta sus novelas más monstruosas: El proceso, El castillo y América. Lo más interesante es transmitir ese entusiasmo”. Destacó el valor de la voluntad imaginativa de Kafka. Todos los temas que abordó son de absoluta actualidad; por ejemplo, el relato Chacales y árabes, pensando en la guerra de Gaza que hace Israel. Kafka fue pionero en tener un acercamiento humano hacia el otro, en este caso el palestino. De eso habla en este texto. Grabado de la serie ‘Informe para una academia’, de Toledo, inspirada en el cuento homónimo de Kafka. Foto Cortesía del IAGO Añadió que Toledo era gran conocedor de Kafka. Refirió que a una colaboradora del IAGO le regaló el grabado Árabes y chacales, que tenía un camello.
“Él le dijo: ‘este camello lo saqué del cuento que se llama así, de Kafka’. Ella tuvo que leer este relato y comprendió a cabalidad. De ese nivel era la interpretación del maestro. Leía un relato y trataba de hacer un símil visual de lo que era esa obra. De ahí se desprendió ‘Informe para una academia’”. En torno a la carpeta que el grabador realizó basado en ese relato, Pergentino José recordó que el artista siempre hablaba de Kafka, de la voluntad creativa que el checo tenía, lo mismo que hizo Toledo: toda su vida estuvo trabajando y siempre trataba de alimentarse de distintas tradiciones. Si el maestro viviera, le hubiera dedicado una exposición o algo, que es lo que vamos a hacer en torno a la obra de Kafka. Una mirada sobre los otros En tanto, la narradora Karina Sosa, ganadora del Premio Primera Novela 2021 por Caballo fantasma, describió a Kafka como “un escritor que nos remite a preguntarnos por la crueldad, por la mirada de los otros sobre nosotros: cómo nos sentimos juzgados y con el peso de la sociedad encima.
En uno de sus diarios dice que si le preguntaran qué necesita para ser feliz, respondería que quedarse debajo de una mesa y que alguien le lance de vez en cuando un pedazo de pan y le dé un poco de agua, y desde ahí escribir o dibujar. Esta sensación de aislarse del mundo convulso, miserable y analizar el alma de los otros y cómo los otros juzgan lo distinto, se me hace muy revelador en la escritura de Kafka. Reseñó que su obra no es difícil, por ejemplo, “Carta al padre, que se cree muy útil para los adolescentes, requiere mucho analizar a los otros después de leerlo.
Es como cuando lees a Dostoievski o a Montaigne, que te remiten al alma de los seres que te rodean y del mundo que estamos atravesando”. Sosa concluyó: Kafka tenía la sencillez que muchos escritores y escritoras no hemos logrado alcanzar, y la construcción de un universo y el retrato del alma humana, así como de preguntarse por la crueldad, lo caótico del mundo en guerra. Mientras ocurre todo eso, cómo sobrevive alguien, cómo se refugia en el arte, en la literatura y observa todo con minucia.
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