El Ecoturismo en Zonas Indígenas | Nuvia Mayorga Delgado
México, 17 de julio de 2017.- En las regiones donde habita la población indígena de México, se encuentran un amplio tipo de ecosistemas y una gran biodiversidad; se calcula que cerca del 60% del territorio de las misas son zonas naturales protegidas.
Gracias a esto se ha venido desarrollando, desde hace algunos años, el ecoturismo o turismo ecológico en zonas indígenas, el cual representa una buena opción para estar en contacto con la naturaleza y que además contribuye con la preservación y sustentabilidad de la misma.
Para las comunidades indígenas, el establecimiento de centros ecoturísticos se ha convertido en los últimos años en una fuente de ingresos y en una excelente alternativa para dar a conocer su cultura y el medio natural en el que habitan, lo que permite a los visitantes, conocer y revalorar la diversidad cultural de los Pueblos Indígenas, así como la riqueza biológica de nuestro país.
Tomando en cuenta estas oportunidades, la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI), como parte de sus programas de apoyo para el desarrollo de las comunidades indígenas ha impulsado con recursos y capacitación la creación de estos centros en distintos lugares del país. Asimismo, estableció la marca distintiva “Paraísos Indígenas”, la cual agrupa a lugares con un importante valor natural, cultural e histórico.
En algunos de estos estos sitios se puede disfrutar de turismo de aventura con actividades, como rapel, tirolesa, kayak, montañismo, explorar grutas, toboganes, por mencionar solo algunas; igualmente existen centros de turismo rural donde se puede conocer más sobre la cultura de los Pueblos Indígenas, todo esto dentro de una variedad de paisajes y clima que van desde la playa, bosques, montaña, sierra, selva, ríos, cuevas, donde es posible observar y sentir la naturaleza en su máximo esplendor.
Es importante señalar que además de las divertidas actividades que se pueden realizar, en estos centros, también se degusta la gastronomía tradicional indígena y hospedarse en cabañas y pequeños hoteles o si se desea también acampar.
Un ejemplo de estos “Paraísos Indígenas” se encuentra en el Valle del Mezquital, Hidalgo. En esta región otomí se encuentran varios centros ecoturísticos, uno de ellos, es “El Banxú”, que ofrece entre sus atractivos áreas de bosque, una cascada, es ideal para la práctica del senderismo, bicicleta de montaña y rapel, entre otras, también podrás nadar dentro de su alberca y probar los deliciosos platillos tradicionales de la región. Para pernoctar cuenta con un hotel; y para conocer un poco más de la cultura otomí hay diversos talleres, entre estos, uno para la elaboración del pulque, bebida sagrada para el Pueblo Otomí.
El ecoturismo ha permitido a las comunidades indígenas valorizar de una nueva forma sus territorios como depositarios y herederos de una gran biodiversidad y riqueza natural, también les ha posibilitado la reapropiación y experimentación de nuevos usos de los recursos naturales que forman parte de su entorno.
Ahora en las vacaciones de verano los invito a conocer estos bellos e increíbles lugares. Acudamos en compañía de la familia, estoy segura que será una experiencia única. Visiten la página web de Paraísos Indígenas (http://www.paraisosindigenas.com/), donde podrán conocer más de estos lugares a través de fotografías, actividades, ofertas gastronómicas y de hospedaje, así como información sobre su localización y el contacto de cada centro ecoturístico para que planeen sus vacaciones o fin de semana.