Pachuca de Soto, Hidalgo; julio de 2021.- El Día Mundial de la Población se estableció en 1989, dos años después de que la población mundial llegase a 5 mil millones de personas, con el propósito de centrar la atención en la importancia de considerar los temas referentes a la misma, particularmente sobre el desarrollo y el medio ambiente.
En 2021, la celebración del Día Mundial de la Población se centra en el tema: “Las opciones y los servicios son la respuesta para reducir las brechas en el ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos”.
México es el décimo país más poblado del mundo, en este año se cuenta con 128 millones 972 mil 439 habitantes, de los cuales 51% son mujeres y 49% son hombres y la edad mediana es de 29 años. Para el año 2030 habrá 138 millones y para el año 2050 habrá 148 millones de personas, aproximadamente.
Conforme a los datos del Consejo Estatal de Población (COESPO), en 2021, Hidalgo cuenta con 3 millones 121 mil 355 habitantes, de los cuales 1 millón 613 mil 331 (51.7%) son mujeres y 1 millón 508 mil 24 (48.3%) son hombres. La edad mediana es de 28.8 años; la esperanza de vida en el territorio hidalguense es de 75.23 años en promedio; 77.95 años para mujeres y 72.45 años para hombres.
En lo referente a la tasa global de fecundidad fue 2.1 hijos promedio que tiene una mujer durante su vida fértil. La tasa de fecundidad adolescente (TFA), es de 49.8 hijos por cada mil mujeres entre 15 y 19 años de edad.
Es necesario mantener el acceso a los servicios de salud y los derechos sexuales y reproductivos (SDSR), proteger al personal de salud y limitar la propagación de la COVID-19; siendo necesario priorizar la protección y la promoción de los derechos de las mujeres y las niñas. En este contexto, es necesario implementar nuevas maneras de proporcionar a las y los adolescentes información acerca de la salud y los derechos sexuales y reproductivos.
Con el Programa Estatal de Cooperación entre el Gobierno de Hidalgo y el Fondo de Población de las Naciones Unidas, se han reforzado las acciones para disminuir las inequidades y desafíos en la provisión de información y servicios de salud sexual y reproductiva, especialmente en mujeres, niñas y adolescentes.
