(CNNMéxico) — La develación de una estatua del expresidente Porfirio Díaz este martes provocó abucheos y gritos en la ciudad de Orizaba, Veracruz.
Es la primera vez en 100 años que una ciudad mexicana realiza una estatua de quien fuera gobernante del país durante más de 30 años y a quien se le considera un dictador. Porfirio Díaz gobernó durante el siglo XIX y principios del XX y fue obligado por el movimiento revolucionario a dejar el poder e irse a Francia, donde murió y sus restos permanecen allí.
El expresidente zarpó en el buque Ypiranga desde el puerto de Veracruz
Las reacciones de historiadores, politicos y ciudadanos no se hicieron esperar y convirtieron elhashtag #PorfirioDíaz en tendencia.
El alcalde priista de Orizaba, Juan Manuel Diez, develó la escultura del expresidente, en medio de protestas de quienes se oponen a realzar la figura del dictador. La estatua se ubica en la Plaza Bicentenario de dicho municipio.
«Es un reconocimiento al patriota, al que siempre peleó por la soberanía nacional, pero también al presidente que supo gobernar a un país en tiempos difíciles, a un México que era ingobernable», dijo Diez, citado por Diario de San Luis.
Descendientes y simpatizantes de Díaz estuvieron en el evento.
El alcalde dijo durante la ceremonia que el homenaje fue pagado con recursos privados y no se utilizó dinero público para su realización.
México perdió a más del 10 % de su población durante la guerra que obligó al general a retirarse de la silla del poder.
Sin embargo, la polémica sigue generando debate.
