Dedicará Academia Mexicana de la Lengua sesión solemne a Manuel Orozco
México, 8 de Junio de 2016.- Con motivo del bicentenario del nacimiento de Manuel Orozco y Berra, y del centenario luctuoso de Francisco de Paula del Paso y Troncoso, la Academia Mexicana de la Lengua (AML) les dedicará su sesión pública solemne de mañana en el Auditorio del Museo Tamayo de Arte Contemporáneo.
El Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) detalló que en la sesión abierta al público participarán la lingüista española Ascensión Hernández Treviño, y el arqueólogo mexicano Eduardo Matos Moctezuma, ambos miembros de ese cuerpo colegiado.
Manuel Orozco y Berra (1816-1881) destacó por su labor como geógrafo, lingüista, paleógrafo e historiador, dejando invaluables obras para el reconocimiento de una gran cantidad de información que permite entender la historia de México, asevera Patrick Johansson, investigador del Instituto de Investigaciones Históricas de la Universidad Nacional Autónoma de México, y miembro de la Academia Mexicana de la Legua.
Sus libros “Geografía de las lenguas” e “Historia antigua y de la Conquista de México” son ejemplos de su aguda inteligencia, sin dejar de lado el “Diccionario universal de historia y geografía”, representan el esfuerzo por difundir y llevar al público mexicano su pasado prehispánico.
Sobre éste último, el investigador añade que es una obra monumental porque fue el primer intento de una síntesis de toda la historia prehispánica y uno de los primeros en haber ensayado el análisis de los glifos de los códices.
De Francisco de Paula del Paso y Troncoso (1842-1916), Johansson opina que su obra fue un poco como la Orozco y Berra, que dio a conocer el pasado prehispánico, sin embargo, su relevancia reside en haber encontrado y publicado los “Códices Matricences” y permitir conocer un documento invaluable.
Del Paso y Troncoso se dedicó por entero a los estudios e investigaciones del tema arqueológico y, muy especialmente, a la indagación de las fuentes documentales, tanto de procedencia indígena como de autores españoles del siglo XVI, por ello se piensa que sin su labor no se podría entender la historia mexicana.
En 1884 fue elegido miembro de número de la Academia Mexicana de la Lengua, y en 1893, designado miembro correspondiente de la Real Academia de la Historia y de la Asociación de Escritores y Artistas Españoles.
De su bibliografía, lo más sobresaliente son sus ensayos publicados en Anales del Museo Nacional de Arqueología, entre ellos “Ensayos sobre los símbolos cronológicos de los mexicanos” (1882) y “Lingüística de la República Mexicana” (1886).
Además de “Códice indiano del sr. Sánchez Solís” (1888) y “Notas arqueológicas y cronológicas” al estudio de interpretación del Códice Borgiano hecho por José Lino Fábrega (1899-1900).
Con información de: NOTIMEX