Ciudad de México, 22 de enero de 2017.- El dirigente de la Confederación Patronal de la República (Coparmex) Gustavo de Hoyos, rechazó que haya ruptura entre los organismos del sector privado por haberse negado a firmar el acuerdo para el fortalecimiento económico y protección a la economía familiar al que convocó el presidente Enrique Peña Nieto, y por no sumarse a las propuestas que este día presentaron las Confederaciones de Cámaras Industriales (Concamin) y de Cámaras Nacionales de Comercio (Concanaco).
Sin embargo, ponderó que el diálogo al que convocó la Coparmex sea más incluyente que el presidencial y cuyo primer encuentro se realizó este jueves con tres organizaciones civiles para lograr, dijo, “el acuerdo que México necesita”.
Incluso De Hoyos y los representantes del Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY), Transparencia Mexicana y Acción Ciudadana contra la Pobreza, manifestaron que se necesita renovar o crear un nuevo pacto social para México, al aludir que el que rige y está plasmado en la Constitución está por cumplir un centenario el próximo mes.
El acuerdo presidencial fue criticado durante el primer diálogo de la Coparmex y los representantes de las organizaciones civiles coincidieron en que se deben trascender los intereses de sectores o grupos, incluidos los patronales, para lograr objetivos comunes, a corto y mediano plazo, que beneficien a toda la sociedad mexicana, tales como la erradicación de la pobreza, la desigualdad, la impunidad y la corrupción.
La necesidad de un nuevo acuerdo es “evidente” para reformar el pacto social y se debe partir de 3 o 4 premisas integrales o generales en la que todos estén de acuerdo como la erradicación de la pobreza y la eliminación de los privilegios, sobre todo porque está comprobado que 7 de cada 10 mexicanos que viven en pobreza reproducen esta condición en la siguiente generación y sólo 4 de cada 100 logran destacar, indicó Enrique Cárdenas, director del CEEY.
Eduardo Bojórquez, director de Transparencia Mexicana, criticó que el Ejecutivo federal no haya convocado a la sociedad civil al acuerdo al que convocó porque sólo participaron organismos empresariales y sindicatos. Ese pacto, dijo Bojórquez, ilustra que las autoridades no han entendido que la sociedad ya cambió porque hay otras formas de organización pero también evidencia que no se ha desmantelado la estructura clientelar del país.
Señaló que aunque resulta muy complejo, los beneficios particulares se deben buscar de manera simultánea a los colectivos y aseguró que “el mejor recorte que puede hacer el gobierno de la República es el recorte a la corrupción”, porque los ingresos que se ahorrarían o generarían con ello superarían la suma de todos los demás recortes.
El acuerdo del Presidente se trató de un “pacto corporativo” cuando lo que se requiere es tender puentes a la sociedad civil y no hacer acuerdo donde sólo se hable de temas patronales y gremiales, como si la sociedad siguiera siendo de castas, señaló a su vez Rogelio Gómez de Acción Ciudadana Frente a la Pobreza.
Con información de: http://www.jornada.unam.mx/
