Los Ángeles, 10 de enero del 2025.- Los bomberos vieron ayer los primeros indicios de combate exitoso a los devastadores incendios en Los Ángeles, aunque el fuego aún arde fuera de control y la enormidad de la devastación comenzó a vislumbrarse.
El presidente saliente, Joe Biden, declaró el área zona catastrófica, mientras Donald Trump, mandatario electo, lo acusó de gran incompetencia, así como a la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, y al gobernador de California, Gavin Newsom, a quien exigió que presente su renuncia.
Docenas de manzanas habitacionales fueron reducidas a escombros humeantes en el pintoresco y lujoso Pacific Palisades, donde sólo quedaron los contornos de las casas y sus chimeneas. En Malibú, apenas algunas palmeras ennegrecidas seguían en pie sobre la destrucción.
Al menos cinco iglesias, una sinagoga, siete escuelas, dos bibliotecas, así como varias boutiques, bares, restaurantes, bancos y tiendas de comestibles están declaradas pérdidas materiales.
El recuento de daños actualizado confirmó la pérdida de más de 10 mil estructuras, 5 mil en Eaton y 5 mil 300 en Palisades. Si bien los bomberos lograron frenar la propagación de los dos incendios más grandes, éstos seguían, hasta el cierre de esta edición, sin ser contenidos. El fuego en Altadena está cero por ciento controlado, indicó el jefe de bomberos, Anthony Marrone. Las cuadrillas de vulcanos –incluidas las que llegaron de estados vecinos y de Canadá– también frenaron las flamas en las colinas de Hollywood –bautizado como Sunset–, lo que permitió suspender ayer una evacuación de habitantes. Lo atacamos duro y rápido, y la madre naturaleza fue un poco más amable con nosotros, expuso el capitán de bomberos Erik Scott.
El agua lanzada desde aeronaves ayudó a tomar el control, afirmó la alcaldesa Bass. Gran parte de la devastación ocurrió el martes, cuando los aeroplanos no pudieron despegar debido a los fuertes vientos.
Sin embargo, es probable que la catástrofe siga avanzando con incendios en curso o nuevos focos que son potenciales de surgir el viernes (hoy), se indicó en un boletín del Servicio Meteorológico estadunidense, ya que se prevé que las ráfagas se fortalezcan y que otra ronda de vientos fuertes azote el área la próxima semana y empeoren las condiciones para sofocar las llamas.
Alrededor de 180 mil residentes están bajo órdenes de evacuación en todos los incendios del condado, que han consumido unos 117 kilómetros cuadrados, área cercana al tamaño de San Francisco.
Entre los siete fallecidos reportados hasta ayer se encontraba Victor Shaw, de 66 años, cuya hermana refirió que se negó a evacuar porque quería proteger su casa. Su cuerpo fue encontrado con una manguera de jardín en la mano a la entrada de su vivienda en ruinas.
Biden prometió fondos y recursos federales adicionales para afrontar el incendio más extendido y devastador en la historia de California; no obstante, Trump culpó del desastre a Newsom: ¡No más excusas de este gobernador incompetente!, ¡Ya es demasiado tarde!, escribió en Truth Social.
La temporada de incendios forestales se está alargando cada vez más ante las crecientes sequía y calor provocados por el cambio climático, cuyas causas Trump niega y, en cambio, promueve extraer más petróleo y reducir la energía renovable.
Nuevo frente
Al cierre de esta edición se informó que un nuevo incendio, denominado Kenneth, comenzó en el valle de San Fernando, lo que llevó a emitir una orden de evacuación en parte de los condados de Ventura y Los Ángeles.
Con información de: Ap y Afp
