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Charlas de taberna | Por: Marcos H. Valerio | Operadora de maquinaria pesada rompe estereotipos de género

“Claro que las mujeres pueden, sólo es cuestión de decidirse y dar el paso. No hay obstáculos, sí se puede”, dice en tono decidido Jazmín Orozco, quien es operadora de maquinaria pesada en el Centro de Reciclamiento y Producción de Plantas Axolotl, donde se trituran troncos, ramas, hojas y maleza acuática entre otros desechos orgánicos.

Yaz, como es conocida entre sus compañeros, recuerda que llegó hace más de cinco años como secretaria, sin embargo, el trabajo administrativo es mínimo, “por lo que me aburría a diario, decidí apoyar en la limpieza, pero no me gustó, y pedí me enseñaran a operar los tractores y el camión de volteo, un día que faltó personal y tuve que entrar de lleno al trabajo operativo”.

“Actualmente opero el minicargador, la retroexcavadora, el camión de volteo y el tractor. En el Centro de Reciclamiento sólo dos personas manejamos estas unidades pesadas”, afirma.

Originaria de San Lorenzo Atemoaya, Xochimilco, comenta que para sus hijos ha sido un ejemplo a seguir y que otras personas “se sorprenden cuando observan una mujer a bordo de tractores y camiones”.

“Con el tractor hago el volteo de pilas (pedacería de troncos, hojas y ramas); con el minicargador o la retroexcavadora cargo los camiones de volteo con mus, triturado o bien con composta”, dice Jazmín Orozco.

Esta operadora pide a sus homólogas no tener miedo de realizar actividades que regularmente son asignadas de hombres. “Nosotras podemos, sólo es decisión y hacerlo”, finaliza.

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