Charlas de taberna | Por: Marcos H. Valerio | La agricultura se robustece en Xochimilco
“La agricultura es como el danzón… nunca pasará de moda”, dice el campesino Rogelio López Cruz, de 70 años de edad, oriundo del barrio de Tlacoapa, Xochimilco, mientras mira con orgullo las milpas de sus chinampas.
Explica que las nuevas generaciones continúan con las mismas técnicas prehispánicas de cultivo, es decir, aún utilizan el chapín o almácigos, que consiste en sacar del fondo de los canales lodo con una caña especial denominada zoquimatl.
A la par, dice, se apoyan del programa social Mecanización Agrícola, donde la Alcaldía les facilita 33 tractores que ocupan con implementos de arado, rastras, surcadoras, rotovator, empacadoras, cegadora, picadora, molinos de granos y forraje y picadoras.
Asegura que gracias a ello, muchos jóvenes han regresado a la actividad agrícola, la cual, no sólo abastece a la demarcación, sino también surte de hortalizas y flores a la Central de Abastos.
Por su parte, Román Capultitla de 35 años de edad, quien tiene su siembra en el paraje Trancatitla, comenta que es la tercera generación de campesinos. Recuerda que desde las cinco años de edad sus abuelos lo llevaban a las chinampas.
Asegura que junto con sus dos hermanos labran la tierra, cultivan flor de nube, crisantemo, clavel, geranio, nochebuena y cempasúchil, además de milpa y lechugas, rábanos, verdolagas, betabel, quelites, romeritos, huanzontle y flor de calabaza.
“Mi abuelo nos enseñó la labor del campo, ocupamos el chapín, es decir, con el lodo que se extrae de los canales, se hace una plancha y se cuadricula; con los dedos se hacen pequeños hoyos donde colocan las semillas. Se deja crecer y posteriormente se trasplanta”.
Debido a que el lodo está compuesto de materia orgánica como pedazos de raíces, hojas y ramas es rico en minerales por lo que actúa como una especie de abono idóneo para el crecimiento de la planta.
Por su parte, el también productor Nicolás Velasco, de 75 años de edad, expone que tiene sus chinampas en la Laguna de Tlilac. Recuerda que el método de cultivo lo han heredado de generación en generación.
Narra que sus antepasados le enseñaron a utilizar las propiedades que otorga la naturaleza, como el lodo o lirio acuático que utilizan como abono en sus cultivos, así como el agua de los canales.
Esta técnica de siembra, hace posible que en plena Ciudad de México, en los mercados de Xochimilco aún podamos encontrar verduras y hortalizas, tales como maíz, calabaza, verdolaga, jitomate, frijol, ejote, chile, chilacayote, cilantro, chayote, quelites, romeritos y huauzontle; así como diversas flores como nochebuena y cempasúchil.