Charlas de taberna | Democracia garantiza cambio de poder pacifico, coinciden académicos | Por: Marcos H. Valerio
En el transcurso de este año, se llevarán a cabo elecciones en 76 países, anticipando la participación de aproximadamente cuatro mil 200 millones de personas en las urnas.
Este proceso democrático asegura la inclusión de diversas voces, la pluralidad de ideas, opciones de gobierno, libertad de expresión y el respeto de los derechos políticos y civiles.
La profesora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales y coordinadora del Seminario Universitario de Transparencia, Jacqueline Peschard, destaca que los gobiernos democráticos facilitan la interacción entre distintas corrientes de opinión y grupos sociales.
Además, subraya que el poder se renueva pacíficamente bajo reglas preestablecidas, en contraste con regímenes autoritarios donde el liderazgo prevalece sobre las normas.
Por su parte, el coordinador de Humanidades de la UNAM, Miguel Armando López Leyva, señala que la democracia ha experimentado altibajos, y la existencia de procesos electorales no garantiza automáticamente su calidad.
Explica que la importancia de las elecciones radica en dinamizar la vida política, permitir cambios en las opciones de gobierno y dar a los ciudadanos la posibilidad de elegir diversas alternativas.
En tanto, el titular de la Cátedra Inteligencia Artificial y Democracia del Instituto Universitario Europeo, Daniel Innerarity, considera que el 2024 será un verdadero test de resistencia para las democracias, evaluando no solo la frecuencia de las elecciones sino la capacidad de los gobiernos electos para abordar desafíos como el cambio climático, la corrupción, la igualdad y la seguridad pública.
Los entrevistados coinciden en que, ante la llegada de populismos, la democracia cuenta con mecanismos para defenderse.
Innerarity destaca la importancia de construir un sistema institucional resistente ante malos gobernantes, mientras que López Leyva advierte sobre el riesgo de que la democracia sea tergiversada por aquellos que llegan al poder mediante la desinformación y el uso indebido de recursos públicos.
Peschard enfatiza la relevancia de la capacidad de comunicación política en los líderes contemporáneos, reconociendo que la democracia debe permitir la existencia de diversas voces y opiniones, evitando la monopolización del discurso político por parte de una sola figura.