- Llegó por un golpe en el abdomen, lo que le provocó además del sangrado, que su riñón se inflamara y tuviera una perforación
- Se llevaron a cabo cuatro operaciones en este paciente, debido a que al padecer de hemofilia, se tenía que controlar su coagulación constantemente
Pachuca, Hgo., a 27 agosto de 2017.- El equipo médico multidisciplinario del Hospital General de Zona con Medicina Familiar (HGZ/MF) No. 1, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), atendió con éxito a un joven con hemofilia quien tras ser operado en cuatro ocasiones, logro mantener su vida y ahora se encuentra en buen estado, esto después de presentar una caída y lastimar órganos internos en la parte del abdomen provocando una severa hemorragia interna.
El paciente tenía antecedentes de cirugías previas en el abdomen, por lo que complicó aún más las cosas para los especialistas del nosocomio; aunado a la hemorragia interna y a su padecimiento de hemofilia, llegó al servicio de urgencias con un riñón obstruido, formando una bolsa hidronefrótica, lo que acumuló orina dentro del órgano con propensión a reventar.
Durante la primera cirugía encontraron un órgano perforado, de donde salía toda la sangre que habría recorrido su abdomen, fueron casi dos litros y medio del líquido vital, así lo relató el cirujano general Alejandro Antonio Ayala Correa, quien refirió que una vez ingresado a terapia intensiva, se corrigió el trastorno de la coagulación con la aplicación de Factor VIII, logrando así regularla.
Posteriormente, una vez controlada la coagulación, se procedió a realizar la segunda cirugía con una laparotomía exploradora, efectuando una incisión en el abdomen, encontrando que tenía una perforación en una víscera por lo que se procedió a operarla; aunado a esto se pudieron percatar que además de que su riñón estaba más grande de lo normal, estaba perforado debido al golpe que se llevó en el abdomen.
Se comenzó a hacer una disección (extirpación) total del riñón la cual, platica el médico, fue muy complicada ya que comenzó a sangrar dado que el Factor VIII que se le había aplicado se había consumido, teniendo que detener la cirugía para que se le suministrara nuevamente y esperar a una tercera intervención.
En la tercera cirugía, donde se extirpó totalmente el riñón en conjunto con el servicio de angiología, se tomó más de cuatro horas llevándola a cabo perfectamente.
En la cuarta cirugía, se pudo observar que el intestino grueso no se encontraba en buenas condiciones por lo que se procedió a quitar un segmento de este, operación llamada colostomía, donde se hace una conexión del tejido bueno del intestino grueso hacia la piel, por donde pudiera evacuar el paciente.
“Siempre se le informó a los familiares que su paciente estaba muy grave y que el pronóstico debido a todas las cirugías no era muy bueno, sin embargo debido a toda esa atención, porque fueron todos los servicios de hospital, nos enorgullece decir que es un caso de éxito” resaltó el médico.
Después de estar en cuidados intensivos, el paciente subió a piso y una vez todo controlado se dio de alta a su domicilio, y actualmente se encuentra en buenas condiciones.
“La única recomendación que se llevó el paciente, es que se cuide, lo mismo que todos deberíamos cuidarnos en nuestra vida diaria, evitando excesos, como lo es la ingesta de demasía de sal y tomando abundantes líquidos” finalizó el cirujano.
