Casi 6 mil 700 atletas se medirán durante 17 días en 39 deportes y 61 disciplinas, en la que será la cita deportiva más grande del planeta antes de que se encienda la llama olímpica el próximo año en Tokio.
Años de entrenamiento, disciplina e inversión verán sus primeros frutos, mientras algunas leyendas del continente comenzarán a decir adiós como la campeona colombiana en triple salto Caterine Ibargüen; el luchador cubano Mijaín López, el nadador estadounidense Nathan Adrian.
El responsable de Panam Sports, el chileno Neven Ilic, pasó por alto cualquier imprevisto y dio el pistoletazo inicial de los Juegos, que se extenderán hasta el 11 de agosto.
«Gracias Perú. Han hecho un trabajo increíble, siéntanse orgullosos de lo que han hecho (…), porque hoy el mundo completo nos mira y América los admira«, declaró el mandamás de la organización deportiva panamericana.
Aunque la cita continental apunta a unir a las naciones, en el plano deportivo se anticipa una batalla: con un medallero liderado históricamente por Estados Unidos, la competencia será por el segundo lugar, con Brasil, Cuba y Canadá como los candidatos más firmes, y Colombia perfilado para meterse en la lucha.