Los derechos inalienables, integrantes e indivisibles de las mujeres, están contenidos en diversos ordenamientos jurídicos internacionales y nacionales, tales como la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW), la Convención sobre los Derechos de la Niñez, la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer (Belem do Pará); en nuestras Constituciones Políticas General de la República y la del Estado de Hidalgo y en las leyes en materia de acceso de las mujeres a una vida libre de violencia.
Estos derechos están inspirados en perspectiva de género. Esto es, en la visión científica, analítica y política sobre las mujeres y los hombres. Con la expedición de normas jurídicas con perspectiva de género se pretende eliminar las causas de la opresión de género como la desigualdad, la injusticia y la jerarquización de las personas a través de la equidad, el adelanto y el bienestar de las mujeres.
Con esta perspectiva, la legislación mexicana ha buscado construir una sociedad en donde las mujeres y los hombres tengan el mismo valor; la igualdad de derechos y oportunidades para acceder a los recursos económicos, a la representación política y social en los ámbitos de toma de decisiones.
Con el respeto a los derechos humanos de las mujeres se ha visto el real empoderamiento de ellas. Paulatinamente, así hay que reconocerlo, se ha migrado de las graves fenómenos de opresión, desigualdad, discriminación, explotación o exclusión hacia escenarios indiscutibles de inclusión, autodeterminación y autonomía. El empoderamiento se ha posibilitado por el ejercicio democrático y la aplicación de la estructuración jurídica de los años recientes que tutela el goce pleno de sus derechos y libertades.
Los principios rectores de igualdad jurídica; de dignidad de las mujeres; de no discriminación; de libertad y de universalidad, entre otros nos permite y a la vez obliga a todos a observar, defender y preservar los derechos humanos de las mujeres.
