Ciudad de México, 25 de mayo de 2016.– Las agresiones sexuales contra niñas y niños en la Ciudad de México van en aumento, principalmente de personas conocidas por las víctimas.
Un informe de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México detalla que en el año 2014 se denunciaron ante la Fiscalía Especial para Delitos Sexuales un total de 365 agresiones contra niñas.
Para el 2015 la cifra llegó a 427; es decir, un aumento de casi el 17 por ciento.
Según el mismo informe en cuanto a niños, en el 2014 se registraron 59 denuncias y en el 2015 llegaron a 93, lo que significa un incremento del 57 por ciento de los casos.
En tanto, en los primeros tres meses del 2016 se había iniciado 100 denuncias por agresiones sexuales a menores de edad.
Los informes de la Procuraduría señalan que en más del 80 por ciento de los casos son personas conocidas de la víctima como tíos, abuelos, sobrinos, primos, vecinos o maestros los responsables de los ataques.
Y casi el 90 por ciento de los casos se dan en lugares cerrados, es decir en el interior de viviendas, escuelas, talleres, deportivos u otras instalaciones.
El 65 por ciento de las agresiones sexuales se cometen contra niños de 0 a 11 años, y el 35 por ciento contra menores de 12 a 17 años de edad.
La PGJCM cuenta con un área de atención especial para atender dichos casos, en los que a las víctimas primero se les realizan estudios médicos legales, para obtener posibles indicios de las agresiones, el resto son entrevistas con los menores y hasta juegos para conocer si se confirma la afectaciones psicológicas a los menores.
También existe la herramienta Bosty, que es equipo virtual que permite tener una mejor interacción con los niños y detectar abusos.
“La mayoría de los agresores sexuales de menores, son personas que también sufrieron algún tipo de agresión sexual en su infancia y que nunca fue atendida”, externó un perito de la Fiscalía para Delitos Sexuales.
Entre las medidas de prevención que los padres pueden tomar se encuentran estar en alerta para evitar que pueda darse una situación de abuso.
Tratar de evitar dejar a los menores solos durante largos periodos de tiempo; hablar con los niños del tema.
Valorar las señales físicas como irritación, inflamación o sarpullido en los genitales, infecciones de vías urinarias, y otros problemas como dolor abdominal o de cabeza fruto de la ansiedad.
Un comportamiento y lenguaje abiertamente sexual y atípico para la edad pueden ser también signos de alarma.
En la CDMX las denuncias por abusos sexuales a niños promedian más de una al día:
– En el 2014 denunciaron 365 agresiones contra menores de edad.
– Para el 2015 pasaron a 427.
– En más del 80% de los casos son personas conocidas de la víctima.
– Resaltan los tíos, abuelos, sobrinos, primos, vecinos o maestros.
– El 90% de los casos se dan en lugares cerrados.
– El 65% de las víctimas son niños de 0 a 11 años.
– Los expertos recomiendan hablar con los niños del tema.
– Estar atento a señales físicas como irritación, inflamación o sarpullido en los genitales.
Arturo Sierra | Reforma
