En esta entrega me he permitido hacer un viraje en el contenido usualmente plasmado semanalmente para consideración de ustedes estimados lectores, para escribir estas líneas que recuerdan al mítico Diego Armando Maradona Franco, quién el día de ayer a la edad de 60 años dejó este plano para convertirse en leyenda del futbol soccer mundial.
El “10” conquistó el olimpo del balompié en el año de 1986 consagrándose campeón del mundo en el Campeonato Mundial de México, con su selección nacional de Argentina frente al combinado alemán acompañado de una fantástica generación de jugadores como Zelada, Ruggeri, Pasarella o Valdano , dirigidos por Carlos Salvador Bilardo. Días antes enfrentándose a la poderosa Inglaterra en los cuartos de final de la justa mundialista, dio vida a dos de los momentos cumbre de la historia de este deporte. Ambos dispares uno del otro, por un lado,
En tanto que, en un dote de máxima capacidad técnica en la conducción del balón, anotó un gol majestuoso denominado el «gol del siglo», ya que burló a prácticamente todo el equipo rival a lo largo de la mayor parte del campo de juego, partiendo desde el terreno de defensa argentina cruzando la media cancha y enfilándose con el esférico al espacio de defensa inglesa hasta la denominada área chica para puntearlo con dirección a la portería y este cruzará la línea de gol significando para ese momento el 2 a 0 en favor del cuadro sudamericano. Diego Maradona fue tan grande en la cancha como excéntrico y disfuncional fuera de ella. Lo importante y sobre todo justo en los seres humanos es hablar de sus aportes en torno a sus actividades primarias y en este caso, el “pelusa” como figura pública dio alegrías con creces a los aficionados al futbol.
El nacido en Lanús, lo ganó prácticamente todo a nivel de clubes y como se expuso previamente, también con su país. Surgido del cuadro Argentinos Juniors, jugó también en otros equipos locales como Newell´s Old Boys y de forma destacada con el Boca Juniors durante dos etapas, club con el que se retiró en 1997 para dejarle el número 10 a otro ídolo del equipo de Buenos Aires como lo es Juan Román Riquelme. Fuera de Argentina militó en el futbol español con el Barcelona y el Sevilla, en tanto que en Italia con el Napoli alcanzó niveles máximos de competitividad y notoriedad como diversos campeonatos.
Años más tarde como jugador retirado emprendió diversos roles como analista de televisión y como entrenador profesional, siendo el director técnico de la Selección de Argentina en el Mundial de Sudáfrica de 2010. Tuvo también en el pasado reciente un breve paso durante el 2019 en el banquillo de los Dorados de Culiacán, club del futbol mexicano.
Maradona ha sido considerado el selecto grupo de mejores jugadores de todos los tiempos junto a Pelé, a Cruyff, Beckenbauer, Di Stéfano, Zidane, Cristiano Ronaldo o Messi. “El Diego” fue un futbolista memorable que tuvo una historia muy cercana a nuestro país alzándose campeón mundial en la cancha del Estadio Azteca e incluso jugó en Pachuca el Mundial de Futbol Rápido en el año de 1994, al margen de haber sido incluido desde el 2011 en el Salón de la Fama del Futbol Internacional situado aquí en nuestra ciudad capital. Descanse en paz este ícono del fútbol mundial.
