Sana alimentación en jóvenes vital para no desarrollar enfermedades crónico degenerativas: IMSS
Pachuca, Hidalgo, a 11 de agosto del 2016
- Los jóvenes son los que tienden a descuidar más su alimentación
- Llevar una buena alimentación junto con la actividad física diaria evitarán el desarrollo de enfermedades, como: diabetes, cáncer, obesidad y sobrepeso
La adolescencia es la etapa donde los cambios suelen provocar estragos, algunos temporales, pero otros se van desarrollando hasta desencadenar alguna enfermedad, de ahí la importancia que desde una corta edad se tenga la cultura de alimentarse sanamente, informó el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), delegación Hidalgo.
La forma más práctica de llevarla a cabo es con El Plato del Bien Comer¸ siendo este, la base de una alimentación sana y balanceada, así lo dio a conocer Rita Barrera García, supervisora de Nutrición y Dietética del IMSS.
Los jóvenes son los que tienden a descuidar más su alimentación, ya que al no tener horarios fijos para comer, por la escuela o alguna otra actividad, pasan por alto las horas de comida y cuando les da hambre tienden a consumir alimentos chatarra, excediéndose en calorías, indicó Rita Barrera.
Esto en el marco del Día Internacional de la Juventud, que coincide con la conmemoración del Día Latinoamericano del Nutricionista, la especialista mencionó que el Nutricionista-Dietista debe de otorgar una atención nutricional integral, para mejorar y prevenir la salud de la población.
Recalcó que llevar una buena alimentación junto con la actividad física diaria, prevén en un futuro, el desarrollo de enfermedades como: diabetes, cáncer, obesidad y sobrepeso, las cuales tienen una mayor taza de morbilidad y mortalidad en México.
Deben de aprender a tener sus horarios de comida bien establecidos, ya que al día se deben hacer tres comidas y dos colaciones, en la cuales deben evitar alimentos altos en grasas y azúcares e incluir alimentos de los tres grupos del Plato del Bien Comer.
De entre los que destacan las frutas y verduras; cereales y tubérculos como arroz, avena, pan integral, camote o yuca; alimentos de origen animal y leguminosas como el frijol, habas, lentejas, garbanzos o los de origen animal como el queso, leche, huevo, entre otros.
El azúcar, aceite, manteca, mantequilla y sal generalmente se agregan a los alimentos para mejorar su sabor; sin embargo, es necesario cuidar su consumo, ya que el abuso propicia a padecer de enfermedades crónico degenerativas.
Finalmente, señaló que llevar una sana alimentación nos ahorrará muchos problemas a futuro, por lo que exhortó a la población joven a tomar las medidas necesarias y gozar de una vida plena, sin olvidar acudir a su Unidad de Medicina Familiar para un chequeo pertinente y hacerlo periódicamente.