Tiempo de pensar en Pemex, no en 2018: Videgaray
19 de abril de 2016.- “Es tiempo de que el secretario de Hacienda haga su trabajo y es lo que hago de tiempo completo”, afirma Luis Videgaray Caso, un poco son- rojado y soltando a la vez una tímida sonrisa tras la pregunta sobre si es momento de manifestar su interés de estar en 2018.
En entrevista con EL UNIVERSAL, durante la Reunión de Primavera del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, reitera —tras la charla sobre el programa de capitalización de Petróleos Mexicanos (Pemex) y de lo que hará en Nueva York esta semana para platicar con inversionistas y analistas sobre la economía mexicana y el futuro de la empresa petrolera— que “de lo que es tiempo, no tengan duda, es de que nos pongamos a trabajar todos en lo que nos corresponde a la hacienda pública”.
Insiste en que tampoco al secretario de Hacienda le compete hablar de política partidista. “Mal haría un secretario de Hacienda si lo hiciera”.
El ex diputado del PRI, admite que si bien tiene una militancia bien conocida, no opina de partidos políticos.
Para el responsable de las finanzas públicas el tiempo es de Pemex. “Es un tema importante” en estos momentos y por eso la reunión en la ciudad de los rascacielos para convencer a los inversionistas y analistas de que la empresa tiene un futuro prometedor por la capacidad que le da la reforma energética y las reservas probadas que hay.
Contundente asegura que Hacienda “no está metiendo las manos” en las decisiones de la empresa productiva del Estado, para eso hay un consejo de administración en el que no participa desde la reforma energética.
Dice que va a estar en Nueva York, junto con el director de Pemex, José Antonio González Anaya, porque “es el mejor interés de México que ese plan (de capitalización) se entienda bien, se conozca bien, particularmente por aquellos quienes son inversionistas en deuda pública tanto del gobierno federal como de Pemex”.
Afirma que “estamos decididos a darle un apoyo claro a Pemex para fortalecer su liquidez particularmente para que pueda cumplir con sus pagos a proveedores en donde se ha acumulado un pasivo importante y al mismo tiempo, lo hemos dicho, que Pemex haga los ajustes que está haciendo toda la industria petrolera global”.
Videgaray señala que “es muy importante que esto se entienda y no sólo dentro de México sino en la comunidad financiera internacional; por eso vamos a Nueva York”.
No se arrepiente. Videgaray afirma que lo mejor que se hizo con Pemex fue darle tratamiento de empresa pública y no como parte de la burocracia.
A pesar de que las aguas turbulentas por las que ha tenido que pasar la petrolera y que no le han favorecido, el secretario de Hacienda asegura que “sin duda fue un buen momento (haber hecho el cambio)” e incluso considera que “es algo que tal vez se debió haber hecho antes”.
Por eso afirma que no hay nada de lo que se pueda arrepentir, por el contrario, asegura que “hoy estaríamos en una situación mucho más grave en la empresa y por lo tanto en las finanzas públicas si no se hubiera llevado a cabo la reforma energética”.
Del tema del sindicato y el por qué no se le exige un mayor esfuerzo dado que parte de los recursos que se le van a dar son para el pago de pensiones, Videgaray contesta que eso lo deben responder el director general y el representante del sindicato.
Sin embargo aclara que uno de los grandes activos de Pemex es el talento de los petroleros mexicanos que son el corazón de la industria.
Programa y remanente. Sobre la reunión de Nueva York, el secretario dice que son tres puntos los que en esencia se van a trasmitir: recursos derivados del ajuste al gasto, el pagaré y la diminución de la carga fiscal.
Es decir, de cómo se va a capitalizar a Pemex y por qué no representa ningún riesgo para las finanzas públicas así como qué papel tiene el remanente del Banco de México con este apoyo.
“Realmente como estamos apoyando a Pemex es a partir de los ahorros que hemos generado con el ajuste preventivo y a través del pagaré que se venció el año pasado que está permitiendo que se haga líquido”, apunta.
De si se usó el remanente explica: “Sin duda no directamente, se está utilizando para apoyar a Pemex. La mejora del balance público que representa el remanente va a ser parcialmente contrarrestada por el incremento de los apoyos a Petróleos Mexicanos pero no hay un uso directo para apoyar a Pemex, aunque sin duda el fortalecimiento de las finanzas públicas que implica el remanente nos genera cierta capacidad para darle algunos apoyos a la empresa”, expresa.
Enfatiza que la empresa está haciendo un esfuerzo real y el apoyo que se le está dando debe destinarse exclusivamente para cubrir los adeudos con los proveedores y para reducir su deuda. Además, dice que no se va a dejar de hacer el ajuste al gasto por 100 mil millones de pesos.
“Algo en lo que no estaríamos de acuerdo desde el punto de vista de la Secretaría de Hacienda es que se le diera un apoyo a Pemex y no hiciera su parte, y aquí estamos viendo lo contrario y para bien; Pemex está haciendo un esfuerzo importante y el gobierno federal está haciendo la parte correspondiente”, matiza.
Relación con EU. Durante su estancia en Washington, Luis Videgaray aprovechó el tiempo para reunirse de manera bilateral con el ministro de finanzas de Francia, con los que conforman el Grupo de los 20 (G20), así como los de los países de la Alianza del Pacífico, con el fin de actualizar agendas de trabajo y evaluar avances.
Con el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Jack Lew, se analizó el tema sobre las instituciones bancarias que se están volviendo más selectivos con sus clientes para evitar riesgos de lavado de dinero y financiamiento al terrorismo y cómo lograr este proceso para que sea compatible con tener un sistema financiero en Norteamérica que sea incluyente y que no implique el terminar relaciones entre instituciones mexicanas y estadounidenses.
“Tenemos una relación muy activa y positiva con el gobierno de Estados Unidos y particularmente entre la Secretaría de Hacienda y el Departamento del Tesoro. Fue una reunión que aprovechamos a los distintos temas que tenemos en la agenda”, detalla.
Además, conversaron de la situación actual de las economías y compartieron puntos de vista sobre el contexto financiero internacional.
“Es un diálogo, sin duda muy importante, conocer la visión del responsable de las finanzas públicas de Estados Unidos, sobre el desempeño de una economía que es determinante para el crecimiento de México”, establece.
Otro aspecto tema que no podía faltar, fue el del intercambio automático de información para evitar la evasión fiscal y que comenzó este año con Estados Unidos, conocido como FATCA, por sus siglas en inglés.
“Hablamos en general de la importancia de seguir avanzando en mecanismos de mayor transparencia en materia tributaria. México y Estados Unidos hemos avanzado enormemente nuestra relación bilateral, tenemos el FATCA, que es el intercambio automático y participamos en iniciativas multilaterales, por ejemplo con el de la OCDE, de tener un estándar común de reportes y en ese sentido creo que hay una gran coincidencia entre México y Estados Unidos de que estos mecanismos deben extenderse a todo el mundo. Fue tema no sólo de la plática bilateral sino uno de los más importantes en la reunión del G-20”, finaliza.
Leonor Flores | El Universal