Pueblos Originarios

El festejo del Año Nuevo purépecha, ritual inveterado que se resiste a desaparecer

Morelia, Mich., 02 de febrero del 2025.- El Año Nuevo purépecha comenzó los últimos minutos de ayer, justo cuando el cenit de la constelación de Orión se encontraba en la parte más elevada, aseguraron autoridades comunales de 43 pueblos originarios, tras el arribo del Fuego Abuelo −Tata Ch’upiri−, que dejó su último aliento en Santa Clara del Cobre, donde se encendió el Fuego Nuevo o Ch’piri Jimbanhi.

Luego de recorrer a pie más de 100 kilómetros desde la comunidad de Ocumicho, municipio de Charapan, la madrugada de ayer la caminata del fuego llegó al pueblo de Santa Clara del Cobre, municipio de Salvador Escalante. Más de 500 participantes llevaban a cuestas las últimas llamas del Año Abuelo, cerca de la medianoche de ayer, y tras una ceremonia pagana “se llevó a descansar al Tata Ch’upiri y se encendió el Fuego Nuevo, lo que marcó la conclusión de 20 meses del año purépecha.

Pavel Guzmán, participante de la caminata e integrante del comité organizador, comentó que se trata de la ceremonia más importante de las regiones Meseta, Ribera de los lagos de Pátzcuaro y Zirahuén, Cañada de los Once Pueblos, Sierra y de la Ciénega de Zacapu. Está fuera de partidos políticos y gobiernos; representa la conservación de nuestra cultura y costumbres en tiempos de globalización y de pérdida de valores.

Se trata de una ceremonia ancestral, que fue retomada en 1983 con el fin de fortalecer la unidad de esta etnia del estado de Michoacán. En esta ocasión asistieron a la comunidad anfitriona de Santa Clara más 20 mil habitantes de las regiones indígenas de la entidad.

La primera vez que se llevó a cabo esta ceremonia fue en Tzintzuntzan; desde entonces se realiza anualmente, convirtiéndose en elemento importante de fortalecimiento y cohesión del pueblo purépecha.

Bendición y purificación

La caminata partió de Ocumicho el pasado 29 de enero con cientos de personas, conocidos como cargadores, que llevaban el anafre encendido del Año Abuelo; pasaron por la zona de la Meseta y comunidades como Quinceo, Arantepakua, Comachuén, San Juan Tumbio y Zirahuén.

Es un ciclo que se repite cada año en una nueva comunidad; el primero de febrero de 2024 arribó por la mañana a la plaza principal de Ocumicho, tras una larga caminata, lo mismo que en esta ocasión en Santa Clara. El Fuego Abuelo fue recibido con pirecuas, sones, abajeños y copal, e iba custodiado por los cargueros.

Las autoridades comunales dicen que el paso del Tata Ch’upiri es una bendición para las comunidades y caminos que van recorriendo, ya que con el humo y las llamas van purificando el lugar. Con el sonido de los caracoles se avisa de su arribo cada vez que alcanza algún poblado.

Poco antes de la medianoche del primero de febrero, los cargueros comenzaron los preparativos para encender el Ch’piri Jimbanhi ; luego, con el sonido de los caracoles se inicia la ceremonia; todos guardan silencio y esperan a que la madera colocada en la piedra empiece a arder; así, las llamas suben y con ello arriba el Año Nuevo purépecha.

Desde las 9 horas de hoy, en la plaza pública de Santa Clara, se presentan bandas de música y danzantes de las diferentes regiones purépechas; además, hay juego de pelota y desfiles de las comunidades participantes. Por la noche el consejo comunal eligió al pueblo que será sede del nuevo año purépecha en 2026, y se llevó a dormir al Fuego Abuelo.

Con información de: https://www.jornada.com.mx/

Botón volver arriba